Jaume Cladera admitió ayer que la llegada al Consejo de Administración del alemán Utz Claassen no será la última. "Habrá alguna incorporación más a final de mes", confirmó el presidente del Real Mallorca. Eso sí, la participación del futuro miembro del club –presumiblemente inglés– será minotitaria. "Seguramente el resto de acciones se repartirán entre los miembros del Consejo", afirmó tras su reunión con su homóloga en el Consell, Francina Armengol. A este encuentro también acudió el vicepresidente Llorenç Serra Ferrer y el segundo técnico y accionista Miquel Àngel Nadal, que se entrevistaron, además, con la consellera de Igualtat i Esports, Josefina Ramis y el director d´ Esports, Paco Blasco.

Más allá de la llegada de este nuevo accionista –Cladera dejó entrever que sería de origen extranjero–, el club estará controlado por Serra Ferrer, Pedro Terrasa y el propio Cladera. De hecho, en los próximos días aumentaran su porcentaje y sindicarán sus títulos para evitar agresiones exteriores. Serra alcanzará el 38 por ciento, mientras que el director general de IB3 Televisió y el hotelero subirán hasta el diez por ciento. Eso significa que la mayoría de la propiedad será mallorquina, tal y como se comprometió Serra Ferrer.

Cladera explicó que la entrada de Claassen en el accionariado tiene una clara finalidad: "Es algo muy bueno para el futuro del club, sobre todo, con el objetivo de potenciar la imagen y el márketing del Mallorca en el extranjero". El objetivo de la reunión con el Consell era el de buscar acuerdos para fomentar el fútbol base toda la isla, tal y como explicó el dirigente.