El Espanyol y el Mallorca acabaron empatando en un partido dominado claramente por el conjunto blanquiazul, pero que se le acabó escapando por su falta de acierto en el remate y por una discutible decisión de Rubinos Pérez que señaló un dudoso penalti a favor de los visitantes. Borja igualó el tanto de Osvaldo.

El Espanyol inició el encuentro dispuesto a despejar todas las dudas que le perseguían por culpa de las numerosas bajas en defensa y por la penosa imagen ofrecida el sábado pasado ante Osasuna. Al final, las ausencias tampoco se notaron tanto como se preveía y el juego de los locales no desmereció el de anteriores ocasiones.

El conjunto blanquiazul arrancó dominando y con un par de buenas oportunidades para adelantarse en el marcador. El Mallorca, mermado en su ataque, se mantuvo a la expectativa y pareció más preocupado de defender bien el resultado que de buscar la portería defendida por Cristian Álvarez.

Verdú fue la referencia del Espanyol. Sin embargo, el centrocampista catalán no estuvo demasiado afortunado en el pase final y apenas conectó con los puntas blanquiazules. El conjunto de Manzano no tuvo demasiados problemas para desbaratar las escasas aproximaciones de los locales.

Osvaldo fue el jugador que más lo intentó. El delantero se ofreció y se movió bien entre los defensas, pero estuvo lento a la hora de ejecutar. Al público le gustó la brega del atacante ítalo-argentino, que en el primer tiempo dio un par de avisos aunque algo imprecisos.

El Espanyol dominaba territorialmente y el Mallorca se contentaba con aguantar bien junto en defensa. Sólo en el tramo final de la primera parte, los de Pochettino se animaron y llegaron con más frecuencia, que no con peligro, al área visitante. Poco juego para obtener algún tipo de recompensa.

Los locales tuvieron en cuatro minutos más acierto que en el primer tiempo. Y también bastante suerte. Una afortunada combinación entre Chica y Luis García acabó en los pies de Osvaldo, que tras un primer rechace, consiguió marcar el primer tanto de los blanquiazules. Debut en casa y gol.

El tanto liberó a Osvaldo en particular y al Espanyol en general. El delantero encontró más espacios en la zaga bermellona y originó alguna acción de peligro. Un buen centro suyo casi propicia el segundo tanto de los locales, pero el cabezazo de Verdú salió algo desviado.

Con Javi Márquez y Baena más asentados que en anteriores ocasiones, el Espanyol fue el claro protagonista del choque. El conjunto catalán merodeó con peligro el área visitante y Callejón pudo dar la tranquilidad a los suyos, pero el andaluz sigue negado de cara a gol.

El partido lo tenía absolutamente controlado el once de Pochettino. No obstante, el Mallorca se encontró con un regalo de Rubinos Pérez, que señaló un dudoso penalti a favor de los visitantes. Borja, que podría haber sido expulsado por sus continuas faltas, empató.

La mala suerte se cebó con el Espanyol y Moisés Hurtado tuvo que ser sustituido por el joven Jordi Amat, que debutó en Primera División con 17 años. El central catalán cumplió. Los últimos minutos del choque apenas se jugaron por culpa de las constantes interrupciones.

Al final, los dos equipos se acabaron repartiendo los puntos. Los locales hicieron más méritos, pero la falta de acierto y una dudosa decisión arbitral acabaron con sus esperanzas de victoria. Los de Manzano, en cambio, se llevaron un premio excesivo de Cornellà-El Prat.

Ficha técnica

1 - RCD Espanyol: C.Álvarez, Chica, Moisés Hurtado (Amat, m.83), Víctor Ruiz, David García; Baena, J.Márquez; Luis García, Verdú (Iván Alonso, m.69), Callejón; y Osvaldo (Marqués, m.69).

1 - RCD Mallorca: Aouate; Josemi, Ramis, Rubén, Corrales; Mario Suárez, Borja (Mattioni, m.89); Varela (Sergi, m.68), Pezzolano (Bruno, m.76), Gonzalo Castro; y Keita.

Goles: 1-0, m.49: Osvaldo; 1-1, m.80: Borja (m.80).

Árbitro: Rubinos Pérez (C.Madrileño). Amonestó a Corrales (m.31), Mario Suárez (m.40), Borja (m.45), Varela (m.64), Moisés Hurtado (m.78), Víctor Ruiz (m.78) y Javi Márquez (m.86).

Incidencias: partido correspondiente a la decimonovena jornada de Liga disputado en el estadio RCDE de Cornellà-El Prat ante 26.210 espectadores. Antes del encuentro, Ander Mirambell, que participará en los Juegos Olímpicos de Vancouver, recibió el saludo de la afición blanquiazul.