El Sevilla no cede y, gracias a dos momentos de inspiración ofensiva, firmados por el argentino Perotti y el brasileño Renato, derrotó a domicilio a un Tenerife que tampoco puede amarrar los puntos en el Heliodoro Rodríguez.

La intimidadora presión inicial a la que el conjunto hispalense sometió al tinerfeño se diluyó una vez transcurrido el primer cuarto de hora de juego, poco después de que Kanouté gozase de una clara oportunidad ante Aragoneses, pero el laxo disparo con la zurda del atacante lo atajó sin problemas el cancerbero.

Poco a poco el equipo canario se despojó del hábito de resignación que le impedía batirse con comodidad. Pero una indecisión de la zaga local en la franja medular permitió al raudo Navas hacerse con un balón, encarar con celeridad el área local perseguido por dos rivales y asistir desde el lateral derecho del área para que Perotti, solo frente a Aragoneses, le batiese con un perspicaz disparo.

Si ya la simple aureola andaluza entrañaba para los locales una plétora de complejidades, encajar un gol las reproducía considerablemente, aunque el designio del choque pudo haberse invertido si en los instantes finales hubiese entrado un franco cabezazo de Sicilia, tras una falta ejecutada por Juanlu.

La segunda parte se inició más convulsiva, puesto que nada más reanudarse Nino sufrió dentro del área una discutida entrada de un defensor, pero el árbitro no la estimó punible. Instantes después, Renato envió el balón a la red con un potente disparo. El gol de Nino se quedó en anécdota.

Esta franca ventaja sevillana en el marcador se le hizo casi insalvable a los de Oltra, pero ni les desanimó ni les hizo escatimar esfuerzos para aderezar el marcador, y Nino lo hizo en el minuto setenta y cuatro al rematar de volea a la red un centro de Juanlu.

De aquí al final, poco más que reseñar, puesto que la insistencia local por cercar a Javi Varas apenas fructificó, puesto que sus defensas en todo momento supieron alejar el peligro con mucho criterio, para conservar así un marcador que le deja en franca ventaja en su lucha por acercarse al liderato.