El presidente del Real Mallorca, Tomeu Vidal, medita muy seriamente la posibilidad de presentar la dimisión al no sentirse apoyado por la nueva propiedad. Vidal, muy cuestionado por el nuevo Consejo de Administración, echa en falta un respaldo público de Mateu Alemany y de las personas de su confianza tras la salida del club de la anterior propiedad. Como publicó ayer este diario, varios miembros del Consejo han mostrado su malestar con Vidal por manifestar éste que su cargo de presidente se sometió a la voluntad del Consejo. "Ha faltado a la verdad", señaló a este diario un consejero.