En una de las reuniones más duras que se recuerdan entre una plantilla del Mallorca con la propiedad, los jugadores hablaron ayer claro y alto al consejero delegado Javier Martí Asensio. Con la fuerza que les da su quinta posición en la tabla, los profesionales acusaron sin rodeos al propietario de la entidad de mentirles de forma reiterada en las últimas semanas por su falta de seriedad a la hora del pago de las primas. "No creemos en tus palabras", le dijeron a un Martí Asensio que, según testigos presenciales, estaba cabizbajo, sin nada que ofrecer como no sea las promesas de siempre.
La escena se produjo en el vestuario de las instalaciones de la Ciutat Esportiva Antonio Asensio a las diez y media de la mañana. Durante cuarenta y cinco minutos, Javier Martí Asensio, acompañado de su asesor financiero Ernesto Chaves, aseguró a la plantilla, en presencia de Gregorio Manzano, que está "culminando una operación bancaria y los problemas se resolverán". Nadie le creyó. Martí Asensio, cuya intención era reunirse únicamente con los cuatro capitanes –Ramis, Nunes, Martí y Webó–, tuvo que desistir de forma inmediata ante la negativa de éstos: "Queremos que todos estén presentes porque luego no se creen lo que les contamos".
El intercambio de opiniones fue muy duro. Los jugadores no se cortaron a la hora de recriminar al consejero delegado sus continuos incumplimientos. "Nos nos informas de nada, todo lo que sabemos es por la prensa", acusó uno de los futbolistas con más peso de la plantilla a un Martí Asensio que escuchaba con la cabeza gacha.
Se le preguntó si está dispuesto a poner dinero de su bolsillo. "No", dio por única respuesta, todo lo contrario que afirmó el pasado 27 de octubre en una entrevista concedida a este diario.
Ernesto Chaves también fue blanco de las críticas. "¿Y tú quién eres?", le preguntaron con sorna los jugadores. "Ernesto Chaves, asesor financiero", respondió. "El que nunca te pones al teléfono cuando te llamamos", le recriminaron, siempre en presencia de un Manzano que intervino poco, pero cuando lo hizo fue de forma contundente: "No sirves para esto", le dijo a un Martí Asensio que ya no sabía dónde ponerse.
El consejero delegado abandonó muy tocado el vestuario, como se pudo comprobar en la charla que mantuvo fuera con el técnico y el asesor financiero. Sin embargo, quiso aparentar absoluta normalidad cuando le comentó al presidente Tomeu Vidal sus impresiones de la cita con la plantilla. "Lo de la ciudad deportiva ha ido muy bien", le explicó, como si no se hubiera dado cuenta de que los jugadores se le acababan de subir a las barbas. Martí Asensio ya no sabe qué carta jugar. El tiempo corre en su contra porque no se puede vivir eternamente de falsas promesas.
