Di Luca, con el Giro 2007 en su palmarés, ganó la partida por velocidad a sus compatriotas Stefano Garzelli (Acqua e Sapone) y Franco Pellizotti, del Liquigas, todos con un tiempo de 4h.15.04, a una media de 38,11 kms/hora.

Dentro del grupo de favoritos, entraron a continuación el colombiano Mauricio Soler, el estadounidense Leipheimer, el sueco Lovkvist y el italiano Ivan Basso. Los españoles David Arroyo (Caisse D'Epargne) y Carlos Sastre (Cervélo) entraron en el grupo principal.

Lance Armstrong aguantó la subida final a San Martino di Castrozza entre los elegidos, pero al final le faltó la chispa de antaño para responder a los ataques que decidieron la victoria. El texano se dejó en meta 15 segundos.

Profesional desde 1999, Di Luca firmó en el primer alto del Giro su segunda victoria de la temporada. No subía al podio desde su victoria de hace dos años en Briançon, por lo que ya completa cinco triunfos parciales en la carrera rosa.

Di Luca, corredor que tiene en su palmarés clásicas de prestigio como la Lieja-Bastoña-Lieja, Amstel Gold Race y Flecha Valona, presentó la primera candidatura como candidato al triunfo final, aunque no se produjo ninguna selección significativa. En la general quedó a tan solo 2 segundos del sueco Lovkvist, el nuevo líder.

La tercera plaza de la general es para el australiano Michael Rogers (Columbia), a 2 segundos. Los estadounidenses Levi Leipheimer y Lance Armstrong figuran en la quinta y sexta plaza respectivamente a 18 y Carlos Sastre aparece décimo, como primer español, a 49 segundos.

La jornada empezó con la retirada del español del español Francisco Pérez, del Caisse D'Epargne, víctima de una caída. En el kilómetro 15 se formó la escapada del día con el español Serafín Martinez (Xacobeo-Galicia), los italianos Bellotti (Barloworld), Viganò (Fuji-Servetto) y De Bonis (Diquigiovanni), el británico Stannard (ISD) y el alemán Voigt (Saxo Bank).

Un ataque camino del alto de la Croce d'Aune, a 51 kilómetros de meta, redujo el grupo a tres corredores: Bellotti, De Bonis e Voigt, mientras que el resto era alcanzado por el pelotón. Entonces Petacchi ya se estaba despidiendo de la maglia rosa, hundido en la subida.

En el ascenso final, con 13,7 kilómetros hasta meta con un porcentaje medio del 5,7 por ciento, quedaron en cabeza Voigt y Bellotti. El alemán arrancó a 8 kilómetros de la pancarta, con el grupo de favoritos a escaso minuto y medio de retraso, dirigido por el Liquigas de Basso.

El veterano Voigt reventó a apenas 3 kilómetros de la cima. Quedaba el debate entre los favoritos, en cuyo grupo no se movió ninguno de los ilustres. Lo intentó el colombiano Mauricio Soler, sin suerte, sin permiso para alcanzar la gloria en solitario.

Armstrong tenía problemas para soportar el moderado ritmo y se descolgó unos metros. Fue cuando Di Luca se enfrentó a la recta de llegada en un reducido esprint para imponerse con claridad en la primera etapa con final en alto. Una jornada que no esclareció demasiados datos. No hubo pelea entre los grandes, tal vez pensando en la exigente etapa del miércoles, segundo asalto montañoso.

Mañana, se disputa la quinta etapa entre San Martino de Castrozza y Alpe di Siusi, de 125 kilómetros.