"Muchas gracias y espero que esta relación no se termine". Así se despidió Ariel Ibagaza del mallorquinismo en la rueda de prensa que dio ayer en el Ono Estadi. Visiblemente emocionado, el mediapunta quiso dar el adiós a la afición rojilla junto al presidente del Mallorca Vicenç Grande. "Es uno de los cinco mejores jugadores de la historia del club", aseguró el mandatario.

El sudamericano explicó las razones de su marcha al Villarreal para las dos próximas dos temporadas -los bermellones cobrarán dos millones más Josemi y el jugador recibirá tres millones por cada una de ellas-: "Es una decisión que no estaba en mi cabeza, una propuesta muy interesante que no me la esperaba del subcampeón de España. Es una buena recompensa a diez años en Europa".

Pero la emoción pudo con ´el Caño´. Cuando hablaba sobre lo que significaba el Mallorca y la hinchada su voz se entrecortó y sus ojos dejaron entrever alguna lágrima. "Es un día difícil para mí. Irme de una casa que me lo ha dado todo, de un equipo y una afición que siempre me quiso. Gracias a ellos he dado este paso, es una buena oportunidad para mí", pronunció con dificultad. "Es un momento difícil, no voy a llorar, como le dije a mi familia, pero estoy triste", agregó.

El discurso de Ibagaza estaba plagado de referencias a la afición, que en las siete temporadas en las que ha jugado le ha tenido como a uno de sus grandes ídolos. "Espero que a la afición no le dé rabia que me vaya. Siempre lo he dado todo por esta camiseta. Hay mucha gente que está contenta por mí. Espero que la gente lo entienda y que sepan que Mallorca para mí es mi casa", afirmó.

El centrocampista dejó clara su lista de recuerdos como bermellón. "Me quedo con el momento de cuando fiché, que tenía 21 años y ahora tengo 31. Llevo diez años en Europa y me ha dado la posibilidad de jugar en una de las mejores Ligas. Ganar la Supercopa de España, la Copa del Rey, perder la Recopa, ser terceros en Liga, jugar la Champions, el gol al Real Madrid en la Copa y la temporada pasada con el séptimo puesto", enumeró sin vacilar. Ibagaza fue más allá en su argumentación. "He jugado con muchos jugadores buenos y la gente ha disfrutado mucho en estos siete años", dijo. "Mi intención es retirarme aquí si las piernas aguantan. Sería importante para mí", subrayó convencido.

No obstante, Fernando Roig, presidente del Villarreal, no dio por cerrado el fichaje del rojillo Ibagaza. "Es una operación en la que se trabaja y si se alcanza un acuerdo para cerrarla, será bueno para todos", aseguró.