El suizo Roger Federer aseguró que la decepción por haber perdido la final de Roland Garros por segundo año consecutivo duró "cinco minutos". "Algún día ganaré Roland Garros", afirmó.

"Hago una lectura positiva. Estoy contento de haber estado cerca y sé que puedo ganar el torneo incluso contra Nadal. Sé que tengo que esperar un año, pero sería peor si tuviera que esperar cuatro, como los Juegos Olímpicos", dijo, y se mostró convencido de que puede ganarle "en cualquier torneo y en cualquier superficie", aunque admitió que ayer fue superior.

"No entré en la pista derrotado, sé que puedo ganarle y que no es invencible. Lo es para otros, pero sabía que si alguien podía ganarle en este torneo era yo, soy el único que le ha ganado un set, pero desgraciadamente no ha sido suficiente", aseguró. "Rafa me ha dado ocasiones que no he aprovechado. No he podido imponer mi juego y eso es mérito suyo", indicó.

El suizo no quiso poner como excusa los errores cometidos y alabó a Nadal: "Es un jugador aguerrido y fuerte mentalmente. Además es zurdo y mi estrategia salta en pedazos contra un zurdo". "Rafa te fatiga, te cansa , te hace fallar muchas bolas, nunca puedes decir que hayas jugado bien contra él. Para mí lo fácil sería decir que no he ganado porque no he aprovechado las bolas de ruptura, pero hay que mirar al adversario que es muy duro, y la forma en la que él ha jugado esos puntos", dijo.

"Es un gran jugador en tierra batida, ha jugado un torneo excelente, es el que mejor se mueve sobre esta superficie, cubre el terreno muy bien y tiene una derecha muy buena en esta superficie, pero lo más importante es su mentalidad. Haber ganado tres Roland Garros con 21 años me impresiona", señaló.