Roger Federer se citó con la prensa con su parsimonia habitual, tranquilo porque sabe que poco más puede hacer para ganar por primera vez en Roland Garros. "No hay motivos para estar nervioso porque hice todo lo que pude. Estoy relajado pero no eludo la gran significación que tiene el partido", indicó.

El suizo, que dijo que la historia de Hamburgo nada tendrá que ver con la de hoy, explicó que "todo es como el año pasado, y lamentablemente el rival también".