Caso curioso el de Jordi López, que se perderá hasta el partido que le enfrentaría a su anterior equipo. El Mallorca había rechazado un año antes el fichaje de Casquero por un millón de euros y gastó, uno después, doscientos mil más para incorporar a un jugador que ha aportado muy poco desde su llegada. Habrá que esperar a la próxima antes de dictar sentencia.

El equipo que venció en Vigo o a Osasuna, además de otros partidos, es capaz de plantar cara al Sevilla y a cualquier otro equipo de primera división. Esta es la principal duda que albergamos ante la cita de esta noche en el Ono Estadi porque, como contrapartida, el que vimos frente al Valencia o el Athlétic tendría pocas posibilidades.

Tampoco tiene muchas el Sevilla, matemáticas aparte, para alcanzar el título deseado, aunque todavía podría evitar tener que disputar la fase previa de la próxima Liga de Campeones. Esto es lo que hay.