"No entiendo la polémica. Todo el mundo juega con las tarjetas y yo lo he hecho por el bien de todos", comentó Xavi, quien considera que, al forzar la sanción, tomó la mejor decisión posible, ya que España requerirá sus servicios en encuentros más importantes que el de Liechtenstein y el Barça le necesita en plenas facultades para el próximo sábado, donde se juega buena parte de sus opciones de conquistar el título de Liga.

En cualquier caso, el mediocentro catalán quiso recordar a quienes han criticado esta decisión, que él siempre ha demostrado su compromiso con la selección española. "Cuando me han llamado he ido y he hecho bien mi trabajo", concluyó.