Rafel Nadal se superó aún más, y si el primer día actuó algo dubitativo al principio ante el rumano Victor Hanescu ayer derrotó a Tommy Robredo con autoridad para situarse en los cuartos de final del Masters Series de Madrid por primera vez.

Nadal dejó patente su superioridad al vencer a Robredo por 6-2 y 6-4 en 78 minutos, con lo que el torneo madrileño contará con dos españoles en cuartos de final, el actual campeón de Roland Garros y el jugador de Xavea David Ferrer que antes había vencido en un gran encuentro al argentino Mariano Puerta por 6-7 (5), 6-1 y 6-4.

Parece imposible que después de permanecer tres semanas sin jugar un partido debido a la tendinitis que aqueja sus piernas, y tras comprobar ante Hanescu que su cuerpo responde, Nadal haya podido afrontar con ejercicio positivo su duelo contra Robredo, un jugador que no ha dejado de actuar y de hacerlo con regularidad, con los octavos en el Abierto de Estados Unidos, los cuartos en Palermo y las semifinales en Viena la pasada semana, como últimos resultados.

La diferencia debería ser abismal entre uno y otro debido a esta falta de actividad por falta del manacorí, pero esto apenas se apreció en el primer partido de la noche de la cuarta jornada.

Nadal se sintió mejor en la pista, con los jugadores del Real Madrid Iker Casillas e Ivan Helguera como testigos especiales. Salió protegido con sus ya características cintas negras en la base de la rodilla, pero corrió, frenó y esprintó como acostumbra, sin quejarse. Ganó el balear el primer set en 33 minutos y dispuso ventaja en el segundo de 3-1, y aunque el de Hostalric logró hacerse con tres juegos seguidos a continuación, Nadal impidió con su seguridad desde el fondo mayores sorpresas. Una ruptura en el 5-4 le dio ya la tranquilidad necesaria para hacerse con el partido después.

Nadal sumó así la victoria número 22 contra un compatriota. No pierde contra un español desde julio del 2004, contra David Ferrer en el torneo de Stuttgart, y con la de ayer añadió la segunda ante Robredo después de Bastad esta misma temporada.

De ser duda ha pasado a ser un aspirante claro, aunque ahora tendrá de nuevo que demostrarlo ante el checo Radek Stepanek, 14 del mundo, verdugo del argentino José Acasuso por 7-6 (3) 4-6 y 7-6 (5).

Nadal se ha impuesto a Stepanek en las tres ocasiones en las que se han encontrado. Este año dos veces, en los torneos de Roma y Barcelona, y el mallorquín sólo ha perdido un set. En cualquier caso, el checo será un rival de cuidado ya que se encuentra en un buen momento y, pese a que Nadal demostró ayer que vuelve por sus fueros, su largo periodo de inactividad le puede pasar factura si el partido se alarga.