El catalán Daniel Pedrosa (Honda) revalidó ayer su título de campeón del mundo de 250cc al imponerse en el Gran Premio de Australia y aprovechar la caída de su rival, el piloto local Casey Stoner. Lo hizo en el lugar donde tuvo la grave lesión a finales de 2003, justo después de lograr su primer título con 18 años. En ese mismo trazado se resarció la pasada temporada y consiguió de forma matemática su primer título en el cuarto de litro. La suerte de Dani en Australia ha cambiado, ayer se confirmó. Por detrás de él llegó ajustado Sebastián Porto (Aprilia) y el mallorquín Jorge Lorenzo (Honda), quien consiguió su quinto podio de la temporada.

Cuando aún faltan dos pruebas para el final del campeonato, Pedrosa se apuntó su tercer título mundial, que se le había complicado en las últimas carreras tras dos victorias consecutivas de Stoner.

"Hoy fue un día fantástico", dijo el español, que el año que viene correrá en MotoGP. "Poca gente se esperaba que hoy -por ayer- ganase el título, pero nosotros hemos hecho nuestro trabajo y hemos sabido aprovechar la circunstancia de la caída de Stoner".

El australiano había partido de la ´pole position´ y era el gran favorito para el triunfo, sobre todo después de que Pedrosa apenas pudiese lograr en la clasificación meterse en la segunda línea de la parrilla.

Sin embargo, Stoner dijo adiós al título precisamente el día de su 20 cumpleaños y en su casa, en Australia. En la cuarta vuelta, la Aprilia del ´aussie´ se salió de la pista y los aficionados locales tuvieron que despedirse de todos los sueños de consumar la remontada. Por encima de la moto del australio se coló la también Aprilia de Alex de Angelis. El bote del sanmarinense no le permitió concluir la carrera. Justo antes había realizado un interesante duelo por el liderato de la carrera junto a Stoner y Lorenzo.

Pedrosa (Honda) decidió a partir de la caída de su rival ponerse a rueda de Porto y esperar su oportunidad. El piloto sudamericano lideró la prueba hasta la recta final, donde el español le sobrepasó sobre la misma línea de meta para llevarse la victoria por 0,027 segundos.

"Mi planteamiento para el final fue ir al rebufo de Sebas y si le pasaba, bien y si no, ser segundo tampoco hubiera sido un mal resultado. No era necesario arriesgar más de la cuenta", explicó Pedrosa. "Estoy tranquilo, podría decir que en pista, Dani no me ganó. Me ganó con el motor en la recta", dijo el piloto argentino.

"El tenía un resto pequeño de motor, y con esa mínima diferencia, aprovechando la succión, me pudo ganar sobre la meta". La tercera plaza se la llevó el también español Jorge Lorenzo, que había partido de la segunda plaza en la parrilla y que tras la caída de Stoner lideró durante un breve tiempo la carrera.

En 125, el suizo Thomas Luthi dio un gran paso en dirección al título mundial. El piloto de Honda se llevó una convincente victoria desde principio a fin y sale de Phillip Island con una ventaja de 12 puntos en la clasificación sobre el finlandés Mika Kallio (KTM), que terminó quinto. El mejor español en el octavo de litro fue Héctor Faubel (Aprilia), sexto.

Gran Rossi

En MotoGP, una vez más, el italiano Valentino Rossi (Yamaha) fue la medida de todas las cosas y se apuntó su undécima victoria de la temporada, después de una dura lucha con el estadounidense Nicky Hayden. El de Tavullia está a una victoria de lograr el récord de grandes premios ganados en una mismo temporada que él mismo y Mick Doohan lograron.

"Ha sido una temporada fantástica y hoy -por ayer- ganamos el título de constructores para Yamaha en el año de su 50 aniversario, así que estoy feliz", dijo el italiano, que ha ganado en los últimos cinco años en Australia.

El español Carlos Checa completó el podio en la categoría reina y llenó el hueco que dejó su compañero de equipo Loris Capirossi, quien en la primera sesión del viernes tuvo una espectacular caída que lo alejó de la carrera del domingo. Capirossi llegaba en un buen estado de forma tras sus dos victorias en Malasia y Japón.