El gran sueño de la selección de fútbol de San Marino, rival de España el miércoles en un partido clave de cara a Alemania 2006, se resume en una palabra y cinco letras: ganar.

"Ganar. Es lo que llevamos soñando desde que ingresamos en la FIFA y en la UEFA en 1988", admite el seleccionador Giampaolo Mazza, aunque luego modere su meta, consciente quizás de que vencer a España el miércoles sería un golpe cercano al milagro: "El objetivo no es ganar, sino dar lo mejor de nosotros como representantes de nuestro país".

Pero está claro que el gran sueño de la selección de fútbol de San Marino es conseguir su primera victoria en un partido oficial, algo que no consigue desde que en 1988.

Desde su ingreso en la FIFA, San Marino ha disputado 63 partidos oficiales, de los que 60 se saldaron con derrota. Lleva jugados ocho partidos en la clasificación para Alemania 2006, y el balance es desolador: marcó dos goles y recibió 31. Evitar las goleadas es hoy por hoy la prioridad realista del conjunto.