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Esgrima

El amor por la esgrima resiste

Balears cuenta con una docena de fichas absolutas y alrededor de un centenar de tiradores entre practicantes y federados en todas las categorías - La actividad se concentra en Mallorca, con el polideportivo Germans Escalas como centro de operaciones

El amor por la esgrima resiste en Balears. Esta modalidad, incluida en el programa olímpico desde los Juegos de Atenas de 1896, es una de las disciplinas con menos practicantes en Mallorca. De hecho, no hay licencias suficientes para constituir una federación balear y la Española está representada a través de una delegación.

Según figura en la memoria del Consejo Superior de Deportes (CSD) del año 2016, en Balears había nueve deportistas seniors federados (5 hombres, 4 mujeres) y nueves clubes. Cifras que se redujeron en 2017, con ocho licencias (5 masculinas y 3 femeninas) y únicamente tres clubes. Estadística relativamente normal si se tiene en cuenta que en toda España se tenían contabilizadas 6.162 fichas absolutas (4.382 hombres, 1.780 mujeres) y había 267 clubes.

Sin datos aún oficiales de 2018, en Balears "hay unas diez o 12 licencias seniors", afirma Joan Noguera, presidente del Club Balear d'Esgrima (CBE), uno de los pilares en los que se sostiene la delegación balear que dirige Asunción Gallardo.

La entidad tiene su sede en el polideportivo Germans Escalas, en donde el Institut Municipal de l'Esport (IME) les cede una sala para entrenar y competir. Y en donde existe una escuela municipal para iniciarse.

Noguera, reconoce que en su momento se intentó formalizar una federación, "pero el número de clubes y de deportistas federados que se exigen es inalcanzable ahora mismo para la esgrima mallorquina". "Estamos muy lejos de conseguirlo", sentencia el directivo, quien recuerda que en Menorca y en Eivissa la esgrima prácticamente no existe.

Pero sin las fichas ni los clubes suficientes como para conformar una Federación Balear, los practicantes de la esgrima no se resignan a que esta modalidad deportiva, con tanto arraigo a nivel internacional y que curiosamente es el único deporte olímpico de origen español, acabe desapareciendo en las islas. Sobre todo, porque en los últimos años se han conseguido buenos resultados a nivel nacional, principalmente en las competiciones de veteranos y de ámbito militar.

En Mallorca, los tiradores están adscritos principalmente al Club Balear d'Esgrima, al Club Hotel Beds y al Club Mallorca d'Esgrima (su sección principal es la relativa a la esgrima histórica). En los últimos meses, muchos de los practicantes de este deporte han acabado por federarse en el CBE. Entre ellos, el club que tiene su sede en el Germans Escalas ha acabado incorporando a varios militares (la esgrima cuenta con una gran participación en las fuerzas armadas).

Los tiradores más destacados en los últimos años, en cuanto a resultados, en la esgrima balear son Sandra Perales (militar de carrera, habitual en podios nacionales internacionales en competiciones de las fuerzas armadas), la también militar en el Ejército de Tierra Aina Maria Llull o los 'veteranos' Magda Carbajal (primera del ranking nacional femenino en 2014, 2015 y 2016) y Jaime Gost, quien ahora compite con ficha de la federación catalana. A ellos hay que añadir a entrenadores como Pedro Huguet, Pauline Close y, principalmente, Alain Sánchez.

Este último, campeón juvenil de esgrima en Cuba, componente de su selección y técnico en un club de La Habana, cuenta con una importante trayectoria en Europa, ya que ha trabajado en Bolonia (Italia) o Burgos antes de desembarcar en Mallorca. Ahora dirige el programa de formación de una cantera mallorquina que tiene en el Germans Escalas su centro neurálgico y que, pese a las dificultades económicas, prepara con torneos locales las competiciones nacionales.

Uno de estos eventos regionales fue el que se desarrolló el pasado sábado 16 de febrero en el polideportivo Germans Escalas de Son Gotleu, el Torneig Cadet i Infantil 2019, que organizado por el Club Balear d'Esgrima reunió a 36 tiradores masculinos y femeninos. Una cifra más que aceptable para un deporte que, entre practicantes y federados, cuenta con casi un centenar de tiradores.

Alain Sánchez: "La esgrima es exigente, no se aprende en dos días"

Alain Sánchez es entrenador del Club Balear d'Esgrima y, junto a Pauline Close y Pedro Huguet -que también están en los cursillos del IME-, se encarga de la formación y desarrollo de los tiradores más jóvenes. Internacional por Cuba y con experiencia en Europa, destaca que en Mallorca "el nivel es mejor de lo que parece". "Miras el ranking y nuestros jóvenes aparecen lejos, pero hay que tener cuenta que en la península los chicos pueden competir en más torneos", y hasta compaginar categorías, como junior y cadete, explica. "Al no poder competir fuera, es más complicado para nuestros tiradores", asegura, y añade: "Realmente, nos podemos situar entre los puestos 60 y 80 del ranking nacional".

Una clasificación que deja entrever la recuperación de la esgrima en la isla. "No hay ni punto de comparación con respecto a anteriores años", señala Sánchez, que agrega: "Estamos en el camino, hemos apostado por una esgrima muy francesa y los resultados vendrán".

El primer gran objetivo son los Campeonatos de España, que se celebrarán en mayo. Para llegar hasta allí, además del trabajo, será indispensable el apoyo institucional del Ajuntament, Consell y Govern. "Debemos reconocer que es complicado, porque la esgrima es un deporte minoritario. Pero están ayudando, en los viajes y en las instalaciones", admite. Al respecto, contar con un espacio en el Germans Escalas facilita las cosas. "Hemos cambiado de sala, y ahora contamos con pista eléctrica. Entrenamos tres días", explica Sánchez, que destaca "la importancia de contar con niños y niñas que empiezan con 6-7 años", porque la esgrima "es un deporte exigente, no se coge en dos días". "Son años de práctica", concluye el técnico del CBE.

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