Llevaba muchos años en el mundo del físicoculturismo y fitness acaparando éxitos (fue campeona del mundo, Miss Universo y Olimpia Nacional y logró varios campeonatos de España). Lejos de retirarse de este exigente mundo, le ha dado desde hace apenas un año una vuelta de rosca a su vida deportiva y ahora triunfa en la halterofilia. No podía empezar mejor, ya que se acaba de proclamar campeona de España en la categoría Masters más de 45 años. Lo hizo venciendo en Valencia en las dos categorías en las que se presentó: en Snatch, levantando 45 kilos de un tirón; y en Clean and Jerk, alzando 75 en dos tiempos. Estos éxitos le dan el pase al Mundial, que se disputará en Barcelona el próximo mes de agosto. Es Fanny Palou (Palma, 1972).
Campeona en fitness y fisicoculturismo. Y ahora también en halterofilia.
Sí. Lo he probado, me ha gustado y se me da bien. Empecé a hacer halterofilia porque el culturismo es poco agradecido. Además, en el nivel que estaba ya lo encontraba poco femenino y tenía que dedicarle muchas horas. En nuestro gimnasio, Entrenando a Campeones, montamos un club de halterofilia y ahí empezó todo.
¿Así de fácil?
No, vamos a ver... el físico ya lo tenía y solo tuve que perfeccionar la técnica. La gente no se cansaba de decirme que yo tenía mucho potencial para esta disciplina que es olímpica, por lo que me hacía más ilusión probarla. Aleksey Torokhtiy, ucraniano olímpico en halterofilia, nos hizo cursos y nos preparó una temporada a mi marido, que es mi entrenador, y a mí. Me he enganchado, y mucho. Además, no había ninguna mujer en el equipo de halterofilia y todos querían a una. Al final me convencieron y estoy muy contenta.
¿Cómo se ha adaptado a la halterofilia?
No ha sido fácil, me ha costado mucho el tema de la técnica. Necesitas mucha elasticidad y la técnica es muy difícil. Parece que son dos movimientos muy fáciles, pero no lo son. Cuando se trata de levantar kilos y ponerlos encima de tu cabeza la técnica es muy complicada. Sobre todo el primer ejercicio, lo que es la arrancada.
¿Al ser una disciplina que exige mucha fuerza tiene alguna dificultad?
Por ser mujer no. Es más, este deporte y ser femenina es totalmente compatible. Toda la vida he sido muy femenina y presumida; eso sí, también muy fuerte. Esto viene con la persona.
Con su volumen muscular, usted no pasará desapercibida por la calle.
[se ríe] Para nada. No me suelen decir cosas feas, esa es la verdad. Es cierto que llamo la atención pero, repito, que no suelen decirme cosas feas; al revés, piropos.
Cualquiera le lleva la contraria...
[vuelve a reírse] No, que va. Soy muy buena chica. Sí siempre suelen decirme 'qué fuerte que estás, debes pegar a tu marido'. Siempre dicen lo mismo. No obstante, antes que hacía fisicoculturismo imponía más, ya que estaba diez kilos por encima de lo que estoy ahora y mi físico era muy exagerado; llamaba la atención. No gustaba tanto. Ahora tengo más curvas, no estoy tan seca.
¿Cómo se prepara?
Con la alimentación siempre me he cuidado. Eso lo llevo muy bien con seis comidas al día con sus proteínas, hidratos y bastante grasa por el tema articular. Luego descanso lo suficiente y entreno dos o tres días a la semana.
¿Qué metas se marca?
El Mundial de Barcelona. Ahora tengo dos semanas de descanso y luego a tope. Me hace mucha ilusión.
En España no se hablaba de halterofilia; y menos femenina, hasta que apareció Lidia Valentín.
Eso ha sido fantástico, el no va más. Soy su fan número uno. Se lo merece. Esta mujer es una de las mejores atletas que conozco. Es una pasada. Es una pura inspiración y tengo la suerte de conocerla.
¿Los países del Este siguen siendo los dominadores en esta parcela?
Sí, pero hay muchos que están sancionados por el tema del doping. Aún así, hay bastantes. Por eso el nivel de España ha subido mucho. No obstante, sigue habiendo deportistas de esos países que son auténticas máquinas.
¿Cómo se puede 'vender' la halterofilia, y más a las mujeres?
La halterofilia, además de adquirir mucha fuerza, es muy mental también. Físicamente te deja hecha un portento, te hace tener unos buenos glúteos y hombros. Para la mujer es un deporte perfecto. Nunca me lo imaginé, creía que era muy masculino, muy hombruno. Si lo sabes llevar y tienes buenos preparadores, es un buen deporte para mujeres. Parece que, cuando se habla de halterofilia, es solo para hombres; te viene la imagen de un hombre entrado en kilos levantando mucho peso. Y eso hoy en día no es así. Lidia Valentín es un portento. Conozco a gente muy estilizada y joven que hace halterofilia. Este deporte está pegando ahora un buen tirón, muy fuerte. En mi categoría casi no hay gente, pero a nivel nacional sí. En el Mundial habrá mucha más competitividad, pero vamos a por todas.
