Un misterioso artista urbano llena Palma de carteles

En las últimas semanas, quienes pasean por Palma se han topado con intervenciones urbanas inesperadas: carteles, frases y objetos poéticos cuidadosamente colocados en espacios cotidianos como la Plaça del Rei Joan Carles I o los alrededores de la Seu. Detrás de estas piezas se encuentra un creador anónimo, que firma como hechosoechas en Instagram y que ya está generando una comunidad de seguidores gracias a su mezcla de romanticismo y melancolía urbana.

Una de las acciones más compartidas consistía en una caja repleta de piruletas, junto al cartel: “Coge una piruleta con cuidado y escribe una palabra”. Al agotarse los dulces, se desvelaba un segundo mensaje en el fondo: “Hubo un tiempo que esta caja estuvo llena, pero la vaciaron como a mi corazón”. El contraste entre el gesto y el mensaje final conmovió a muchos viandantes, que no dudaron en compartir la escena en redes.

Performante frente la Seu de Palma

Otra de las intervenciones recientes más fotografiadas apareció frente a la Seu: una fila de folios blancos sobre el suelo, alineados para formar la frase: “Te he olvidado a mi manera”. Una forma de intervenir el espacio público con frases íntimas, sin pedir permiso, pero sin dañar. En una era en la que el arte urbano a menudo choca con normativas municipales, el autor parece ser consciente de los límites legales que lo rodean.

En una publicación reciente, el propio artista anónimo escribe: “Hay mucha gente que no sabe, que ya no se podrá pegar carteles en la calle, pero trataré de ser sigiloso y sutil para dejaros momentos dulces e inspiradores”. Ese deseo de permanecer en la sombra, pero seguir sembrando poesía visual en las calles, ha calado entre residentes y visitantes, que encuentran en sus obras una pausa emocional en el ajetreo urbano.

Una Palma más poética

En un contexto social donde la ciudad vive tensiones por la masificación turística o los problemas de movilidad, propuestas como las de hechosoechas parecen conectar con una necesidad más profunda de recuperar lo íntimo, lo emocional y lo humano en el espacio público. “Ojalá algún día, por casualidad te vea en la calle, y poder darte un abrazo para agradecerte por todo lo que haces”, comentaba una usuaria en Instagram tras ver uno de los mensajes del artista. Y quizás esa sea la mejor manera de describir la obra de este autor: arte urbano que no grita, pero deja huella.