Caso Malinche

Imputan por presunta coacción a dos de los policías que instruyeron el atestado del caso Nacho Cano

Diecisiete de los 18 becarios presentaron denuncias contra los agentes de Policía Nacional Les acusan de amenazarlos, coaccionarlos y hacerles preguntas de índole sexual

Nacho Cano

Nacho Cano / EFE

David López Frías

Nuevo giro de guión en el caso Malinche, que investiga la participación y contratación de 18 becarios mexicanos en el musical del mismo nombre que dirige el productor Nacho Cano. La novedad en esta ocasión no apunta contra el artista madrileño, sino contra dos de los agentes de la Policía Nacional que instruyeron el atestado y a los que los propios estudiantes mexicanos acabaron señalando y denunciando.

Los dos policías pasan de acusadores a acusados, según una providencia a la que ha tenido acceso El Periódico de España. El magistrado juez del Juzgado de Instruccion 38 de Madrid, Carlos Valle Muñoz-Torrero, ha llamado a ambos declarar en calidad de investigados, tras instruir el atestado en el que presuntamente se coacciono, amedrentó y vulneraron los derechos fundamentales de los becarios mexicanos que se formaban en España para posteriormente, ser integrantes del musical 'Malinche' de Nacho Cano que se estrenará el día 28 de marzo de 2025 en México.

Estos agentes tendrán que declarar el próximo 27 de febrero a las 10:30 de la mañana en los juzgados de Plaza de Castilla, el escenario en el que se está desarrollando toda la parte judicial del caso. Lo harán tras ser denunciados por 17 de los 18 becarios que viajaron desde México para participar en el musical. Es decir, todos menos Lesly Ochoa, la becaria que denunció a Nacho Cano.

Preguntas sexuales

Estos becarios denunciaron que, tras la entrada y registro de la policía en el local de ensayo del musical, fueron trasladados a la comisaría de la calle Leganitos (Distrito Centro de Madrid) y que, una vez allí, los agentes les retuvieron contra su voluntad durante horas en comisaría y les sustrajeron sus teléfonos móviles, dejándoles incomunicados y siendo tratados por las autoridades españolas como sospechosos, a pesar de tener todos los papeles en regla.

Según denunciaron los 17 becarios mexicanos, el trato dispensado por los agentes fue degradante y vejatorio. Aseguran que el interrogatorio policial fue dirigido y prospectivo. Que se incluyeron preguntas improcedentes de índole sexual. Y que hicieron especial hincapié en preguntar a las becarias mexicanas si Nacho Cano las había acosado o si había cometido alguna agresión sexual.

El propio Nacho Cano ya se refirió a estos acontecimientos en su comparecencia ante la prensa a la entrada de los juzgados de Plaza Castilla, mencionando al comisario Alberto Carba como uno de los instigadores de esta forma de proceder, apuntando que dicho mando policial está supeditado al ministro Marlaska. Y que todo este caso no es más que una persecución política contra su figura y "un montaje contra mí de Pedro Sánchez por haber apoyado a Isabel Díaz Ayuso".

La imputación de los dos agentes de la Policía Nacional se desarrollará en paralelo pero de forma independiente del proceso que se sigue contra Nacho Cano tras la denuncia de Lesly Ochoa, la becaria mexicana que le denunció por presuntos delitos de favorecimiento de la inmigración ilegal y contra los derechos de los trabajadores.

Al respecto de estas acusaciones de la bailarina mexicana, existe un informe de Inspección de Trabajo que consta en el juzgado y que descarta que los becarios mexicanos tuviesen con el productor madrileño una relación laboral encubierta. Tanto Cano como Ochoa ya declararon en sede judicial y el proceso sigue su curso.

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