Tomeu Seguí: "La música me ha acompañado en las peores y en las mejores horas de mi vida"

Tomeu Seguí une a su faceta de organizador de conciertos de música antigua (dirige los Festivales de Caimari y de Inca) la de organista y clavecinista, dando conciertos y participando en eventos en Europa y fuera del continente, habiendo actuado en Canadá y Japón.

Para este jueves, día 23, en la basílica de Sant Francesc de Palma, ha preparado una sesión para recaudar fondos destinados a la Fundación Carreras y Proyecto Nana, una iniciativa solidaria que, según Seguí, "tiene como objetivo el mantener la ilusión y la esperanza de los niños hospitalizados en los momentos difíciles de la enfermedad de Linfoma no Hodgkin”.

Preguntado sobre cómo surge esta iniciativa y cuál es el objetivo, el organista responde que a través de su vinculación personal con el proyecto: “He sufrido en primera persona este proceso cuando era apenas un niño de 13 años y, en una segunda ocasión, de adulto. Es necesario socializar la importancia y el impacto de estas enfermedades y la labor indispensable que lleva a cabo la Fundación Carreras”.

Transmitir esperanza

Y añade: “Si no fuera por el trasplante de médula que recibí hace 6 años, no podría estar hoy en situación de transmitir mi testimonio y la esperanza, que son el leitmotiv de este concierto”.

Según los datos dados a conocer, durante el año pasado se diagnosticaron en España casi treinta mil casos de neoplasias hematológicas en pacientes de todas las edades, y no todos pueden llegar a buen puerto, pues es necesario contar, entre otros elementos, con una persona compatible con el paciente. Seguí afirma que tuvo la suerte de contar con la compatibilidad de su hermano, que para el organista “fue un milagro, de aquí que las donaciones y la investigación sean de vital importancia”.

Para el concierto de este jueves, el organista ha elegido un repertorio que va desde Bach hacia atrás, pues como bien señala: “el instrumento de Sant Francesc está en magnifico estado y permite perfectamente interpretar música de compositores como Bendusi, Frescobaldi, Kerll, Haendel, Böhm y el propio Bach. Será una hora muy intensa donde trataré de transmitir sobre todo la fuerza que la música en su máximo esplendor puede hacer llegar”.

Efecto curativo de la música

Para Tomeu, con eventos como este se demuestra “la importancia de la música como efecto curativo y reparador, pues la música me ha acompañado en las peores y en las mejores horas de mi vida. Es una receta que recomiendo para todos”.

Seguí se encuentra preparando el Festival de Música Barroca de Inca que tendrá lugar desde mediados de febrero hasta principios de abril con diez actuaciones previstas entre conferencias y conciertos.

También trabaja en un proyecto de colaboración con músicos italianos para interpretar la polifonía renacentista y preparar recitales en México, Baviera, Estados Unidos e Italia, concretamente en Florencia, Palermo y Monte Castello de Vibio, una ciudad de la Umbría en la que actuará en el famoso Teatro de la Concordia, considerado el teatro más pequeño del mundo en el que caben tan sólo 99 personas.