Marga Roig, escritora con parálisis cerebral: «Escribo y dibujo para dar visibilidad a la diversidad funcional»

Marga Roig padece parálisis cerebral infantil, trastorno provocado a causa de problemas con el cordón umbilical, que se le envolvió alrededor del cuello durante la gestación. Hace dos décadas decidió entregarse a la escritura y la ilustración, a razón de un libro por año, «para dar visibilidad a la diversidad funcional, porque mis cuentos enseñan valores», explica la autora con la ayuda de un teclado con audio en la sede de Aspaym Illes Balears, asociación de personas con lesión medular y otras discapacidades físicas.

En Aspaym, Roig ha encontrado un servicio, financiado por la Conselleria de Serveis Socials i Esports del Govern, que le proporciona una acompañante, Sheila Pereira, quien le acompaña en la realización de sus actividades cotidianas. Desde que cuenta con su ayuda confiesa que es «más independiente, no dependo de mi familia para salir a hacer cosas, como comprar ropa o adquirir el material para dar forma a mis cuentos».

Jenifer Morilla es la responsable de este Servei de acompanyament per a persones amb discapacitat física i necessitat de suport extens, y recuerda que «se incumple el derecho reconocido por la ONU en 2006 y ratificado por el estado español de vivir de forma independiente y a ser incluidos en la comunidad, poniendo a su disposición los apoyos necesarios para hacerlos posibles, como la asistencia personal», una figura por la que se lucha en la actualidad.

«Yo estoy contenta con este servicio, porque los acompañantes son empáticos y te dan independencia. Recomiendo este servicio a las personas con diversidad funcional, porque da la libertad de tener tu propia vida», argumenta Roig.

Dos pasiones: "Escribir y estar con niños"

En los cuentos, Roig ha encontrado una herramienta intelectual que le permite combinar dos de sus pasiones, «escribir y estar con niños». El extraño tesoro, País de la Alegría y Tener no da la felicidad son algunos de los títulos de su producción literaria. «Escribo para expresar mis sentimientos y pensamientos, sobre mi día a día», añade.

Entregarse al ejercicio de la literatura no siempre es fácil. «El bloqueo a veces es inevitable, pero es importante desconectar y pensar en uno mismo», reconoce. «Me lleva más tiempo la ilustración que la escritura. Dibujo con un programa informático de diseño, y al escribir en el teclado lo único que hace la acompañante es corregir alguna palabra con la que pueda equivocarme», agrega. Más sencillo le resulta responder a las preguntas que le hacen los alumnos de infantil y primaria de los diferentes colegios que visita a lo largo del año, siempre acompañada por su acompañante.

Su cuento favorito

«El que se reía de los otros, que habla de una chica con parálisis cerebral que sufre la exclusión social, es uno de mis cuentos favoritos», señala con una contagiosa sonrisa, que se repite cuando le preguntan por otras pasiones al margen de la literatura. «La hípica me gusta mucho. Llevo diez años practicándola», apunta.

«A Roig le gusta mucho el contacto con los niños. Estas semanas han sido intensas. Hemos estado en la Feria del Libro de Palmanova y en unos días visitaremos un nuevo colegio», comenta Sheila, con quien le une una «buena amistad» que nació en Aspace, centro de referencia dedicado a personas con parálisis cerebral o discapacidad afines.

De su próximo cuento Roig no quiere desvelar nada. «Te lo contaré en otra entrevista», bromea, no sin antes dar dos direcciones para aquellos que quieran conocer su trabajo literario, la de su Instagram (@cuentosconmensaje) y la de su Facebook (Los cuentos de Marga Roig).

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