Real Academia Española

La escritora y filóloga Clara Sánchez ocupará la silla 'X' de la RAE

El Pleno de la Real Academia Española elige a Sánchez para ocupar la silla 'X', vacante desde el fallecimiento de Francisco Brines el 20 de mayo de 2021

La escritora Clara Sánchez, en su casa.

La escritora Clara Sánchez, en su casa. / José Luis Roca

EFE / EP

Vacante desde el fallecimiento de Francisco Brines, la filóloga y escritora Clara Sánchez, una de las voces más relevantes de la narrativa nacional, galardonada con premios como el Nadal o el Planeta, ocupará la silla X de la Real Academia Española (RAE).

El Pleno de la RAE ha elegido en su sesión de este jueves a la escritora y filóloga Clara Sánchez (Guadalajara, 1 de marzo de 1955) para ocupar la silla "X", vacante desde el fallecimiento de Francisco Brines el 20 de mayo de 2021.

Su candidatura fue presentada por las académicas Soledad Puértolas, Carme Riera y Paloma Díaz-Mas.

Se licenció en Filología Hispánica por la Universidad Complutense con una tesis, dirigida por el catedrático de Literatura Hispanoamericana de la Autónoma, Teodosio Fernández, que versó sobre la Narrativa Mexicana de la Onda: Gustavo Sainz, un estudio encaminado a desentrañar cómo el llamado "juvenilismo" mexicano estaba azotando el arte narrativo y dotándolo de una frescura e irreverencia desconocidas.

En la Complutense se adentró en el campo de la semántica bajo la batuta del académico Gregorio Salvador Caja. Fue profesora universitaria durante diecisiete años en la UNED, pero además ha participado de tertuliana, articulista y colaboradora de diversos medios españoles y extranjeros.

Aportaciones fundamentales a la literatura

Desde su primera novela publicada 'Piedras preciosas' (1989), la crítica destacó, como aportaciones fundamentales a la literatura de finales del siglo XX, la originalidad y modernidad de su narrativa, su contemporaneidad.

Pasados treinta y cuatro años y cientos de páginas escritas, no ha cejado en su empeño en indagar en los entresijos del presente, en atrapar lo que los tiempos traen. "Ella misma ha confesado su obsesión por arrancar lo extraordinario de lo ordinario, lo sorprendente de las vidas más rutinarias", señala en una nota la RAE.

Su sentimiento vital, arrastrado desde la infancia, de extrañeza e incomodidad ante la vida ha quedado plasmado en todas sus novelas en personajes que se ven obligados a adaptarse a nuevas e intempestivas situaciones como la mirada extrañada sobre la urbanización donde vive el chico de "Últimas noticias del paraíso".

Es autora de las novelas 'Piedras preciosas' (1989), 'No es distinta la noche' (1990), 'El palacio varado' (1993), 'Desde el mirador' (1996) o 'El misterio de todos los días' (1999).

También son suyas las obras 'Últimas noticias del paraíso' (2000), 'Un millón de luces' (2004), 'Presentimientos' (2008), 'Lo que esconde tu nombre' (2010), 'Entra en mi vida' (2012), 'El cielo ha vuelto' (2013), 'Cuando llega la luz' (2016), 'El amante silencioso' (2019) o 'Infierno en el paraíso' (2021).

La novela 'I peccati di Marisa Salas' (2022), editada por Garzanti, Italia, 'llegará próximamente en España', señala la RAE.

Clara Sánchez ha sido traducida a varios idiomas y su obra tiene importante repercusión internacional, especialmente en Italia. Entre los galardones recibidos está el premio Alfaguara ('Últimas noticias del paraíso'), el Nadal ('Lo que esconde tu nombre') o el Planeta ('El cielo ha vuelto'), entre otros reconocimientos nacionales e internacionales.

Ha prologado libros, entre otros de Mercè Rodoreda ('Espejo roto'), de Yukio Mishima ('El marino que surgió de la gracia del mar') o de Stevenson ('Dr. Jekyll y Mr.Hyde').

El lenguaje y la tilde del sólo

En otro punto, Sánchez se ha manifestado a favor de "simplificar y clarificar el lenguaje" para que la comunicación sea fructífera, poniendo como ejemplo la jerga de las citaciones judiciales para los ciudadanos de a pie.

En referencia la polémica en torno a la tilde del 'solo', la galardonada con algunos de los premios más importantes de las letras españolas, como el Planeta, el Nadal o el Alfaguara, ha expresado que le parece "maravilloso" que "la comidilla" de las conversaciones fuera sobre la lengua y no sobre "misiles o tanques".

Sobre si prefiere usar la tilde o no, la escritora de novelas como 'El cielo ha vuelto' se ha mostrado "cómplice de la economía del lenguaje" y de no complicar nuestro instrumento de comunicación, por lo que prefiere eliminarla.

Para la escritora, que la Real Academia esté haciendo "énfasis" en introducir "todos aquellos vocablos de la vida corriente que se van generando a través de las preocupaciones de los ciudadanos".

Asimismo, ha destacado que hay que modernizar el lenguaje "en referencia a las actividades y a las nuevas costumbres que tenemos a través de las tecnologías".

"La lengua es plástica, la lengua es moldeable y tiene que recoger de alguna manera las inquietudes de la ciudadanía. Luego habrá que discutir hasta qué punto algo es factible o que tiene suficiente solera como para introducirlo o si todavía está en ciernes, pero la motivación y la inquietud y la dinámica de la academia sí que tiene que ser esa", ha declarado.