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Ekain Elorza: «Componemos desde la calma, no nos asusta que se olviden de nosotros»

El grupo madrileño aterrizará por cuarta vez en la isla pero, esta vez, para presentar un nuevo disco, un nuevo repertorio y un nuevo formato de salas, en Es Gremi

Morgan coge el relevo en las Mallorca Live Nights de Es Gremi este sábado 25 de febrero.  |

Morgan coge el relevo en las Mallorca Live Nights de Es Gremi este sábado 25 de febrero. |

Ekain Elorza lo supo de forma «instantánea»: Sargento de hierro se convertiría en un tema para la posteridad, así lo firmó y así se ha cumplido. Pero desde el lanzamiento de su icónico tema, Morgan ha pasado por un largo recorrido por teatros -y estadios- que, desde hace un año, se ha detenido en las salas de todo el país. Ahora es el turno de las Mallorca Live Nights de Es Gremi donde la banda se reencontrará mañana sábado 25 de febrero con el público que les ovacionó puesto en pie hace dos años.

¿Qué diferencia hay entre tocar en salas o teatros?

La primera diferencia la hacemos nosotros con el repertorio: intentamos siempre adaptarlo al recinto. No es lo mismo tocar en un teatro donde todo el mundo está sentado, en silencio, el sonido es más cristalino y puedes centrarte más en los detalles, hacer un concierto más íntimo. En una sala la gente puede saltar, cantar e interactuar de toda manera. El disfrute de la banda es prácticamente el mismo. Nos encanta el escenario sea donde sea.

El mes pasado tocaron en el Wizink Center, que no es ni uno ni otro.

Ha sido un antes y un después en nuestra carrera. En ningún momento pensamos que íbamos a acabar tocando en el Wizink Center. No era un objetivo en nuestra carrera. Cuando nos lo plantearon lo primero fue mucho miedo y muchos nervios. Ha sido una experiencia increíble. Los preparativos han sido muy intensos, la responsabilidad estaba ahí, sentíamos que era una noche única y decidimos que nos acompañaran un cuarteto de cuerda, un quinteto de viento y un trío de voces. Al final fuimos 18 músicos sobre el escenario durante todo el concierto. Pensamos que si íbamos a un sitio tan grande teníamos que ir a lo grande y que se quedara en el recuerdo.

En Mallorca han pasado por todos los formatos y, ahora, Es Gremi para las Mallorca Live Nights, que es todo lo contrario.

En verano de 2018 estuvimos en el Mallorca Live, luego en el Teatre Principal en noviembre de ese mismo año y el año siguiente fuimos al Auditorium, donde celebramos el primer concierto del fin de gira y habíamos preparado un repertorio nuevo. Estábamos nerviosísimos porque no sabíamos cómo iba a funcionar, era algo nuevo para nosotros, y cuando todavía quedaba media hora de concierto se levantó todo el público a aplaudirnos. Tengo un recuerdo maravilloso de ese día. Es la primera vez que vamos a sala y tenemos ganas de ver cómo responde el público.

Tanto la composición del disco en pandemia o el hecho de llevar tanto tiempo girando por el mundo con las mismas canciones llevan a preguntarse ¿les gusta tomarse las cosas con calma?

Somos una banda que intentamos reposar todo: por muy emocionante que sea una noticia, nos tomamos unos días para pensarla y poner nuestras ideas en común. La toma de decisiones a veces se alarga un poco, demasiado, y nos pilla el toro (risas). Cuando terminamos la gira de Hearth necesitábamos parar, asimilar y empezar a componer este disco desde la calma. No nos asustaba que se olvidaran de nosotros. De casualidad, se paró el mundo con la pandemia y coincidió con nuestro parón.

La industria musical ahora es completamente lo contrario, muchos artistas van a canción por mes.

Intentamos no mirar mucho a nuestro alrededor, cómo funciona, y hacemos nuestro camino como a nosotros nos parece que debemos hacerlo. Parece que a la gente le está gustando. Nos permite hacer las cosas de una forma más natural y más propia: no nos interesa hacer canciones de tres minutos con el sonido que se lleva y que puedan entrar en una lista de Spotify. Intentamos que no nos influya y ser lo más libres posible. Es fácil contaminarte del entorno en el que vivimos. A nosotros nos gusta hacer canciones y compartirlas con amigos.

Cantan mucho en inglés, ¿eso cómo se recibe en España?

En nuestro caso bien. Es un tema recurrente, el por qué no cantamos en castellano, pero es que no les damos muchas vueltas al asunto. Si con el tiempo llegan más canciones en castellano, pues llegarán. Ahora mismo no sentimos la necesidad de hacer algún cambio al respecto. La gente que viene a los conciertos disfruta y de dos horas, 10 minutos son en castellano, así que no creo que la gente salga feliz solo por esos 10 minutos. No es algo que nos genere dudas o miedo.

Cuando la gente piensa en Morgan, inevitablemente piensa en Sargento de hierro. ¿Qué siente frente a ese tema: cansancio, respeto o deificación?

En el momento en el que Nina la trajo al local fui plenamente consciente de que era una canción increíble, un temazo. Supe que ya era un clásico instantáneamente. Me encanta tocarla y estaré encantada de tocarla el resto de mi vida.

¿Qué les ha aportado su nuevo álbum, The River And The Stone?

Hemos explorado el sonido, con sintetizadores y nuevos aparatos. Hemos intentado ampliar esa paleta de colores. No nos hemos ceñido a algo en concreto, hemos tenido mucha libertad creativa, y si una canción tenía que durar siete minutos que durara eso. No nos hemos censurado, hemos dejado que todo fluyera. Todo su proceso de composición influirá en los próximos trabajos: toda la experimentación y la convivencia ha tenido un impacto en nosotros.