La noticia saltó a las siete y media de la tarde. Vigo estaba a un suspiro de vivir un concierto histórico. Era el día de la resurrección de Balaídos como recinto de grandes directos. Y la casualidad quiso que fueran precisamente unos británicos los encargados de resucitarlo tras 21 años en silencio. Los mismos que a escasas tres horas de saltar al escenario habían perdido a su reina. Los mismos que al filo de las diez y media de la noche le iban a rendir un sentido homenaje desde la ciudad olívica.

En algunos corrillos se especulaba este jueves incluso con que Muse pudiera suspender el concierto en Vigo en señal de luto y respeto por el fallecimiento de la reina Isabel II de Inglaterra. Pero no.

El silencio de los 17.000 asistentes dio paso a una sonora ovación

La banda británica saltó puntual a su cita. Y lo hizo con la normalidad del resto de conciertos de su gira. Enmascarados, con fuego sobre el escenario y tocando el tema Will of the People provocaron la locura en Balaídos ante 17.000 personas. Fue uno de los 'momentazos' del concierto. Por su fuerza. Por la puesta en escena. Porque era un momento histórico en Vigo. Pero también porque era la antesala del emocionante tributo que iban a rendir a la última gran reina de Europa. A su reina.

Tras finalizar su primer tema, con el público ya en el bolsillo y antes de dar paso a otro de sus clásicos, Hysteria, se produjo uno de los momentos más conmovedores del concierto. De la guitarra de Matt Bellamy comenzó a sonar un riff con un himno inconfundibleGod save de Queen (Dios salve a la reina).

Así sonó Muse en Balaídos. ALBA VILLAR / JORGE GARNELO

Fueron apenas 30 segundos de emoción. Medio minuto de un silencio casi escrupuloso entre el público. Un sentido homenaje tras el que las 17.000 almas rompieron en aplausos y dieron una sonora ovación. Fue el tributo a miles de kilómetros de distancia con el que Muse quiso homenajear a Isabel II de Inglaterra desde Vigo.