"En la vida en general no nos preguntamos ‘qué pasaría si…’. En situaciones tan trágicas nadie sabe cómo se va a comportar. Vivimos en un tiempo en el que es importante pensar en ello", ha sentenciado Serguéi Loznitsa esta mañana en un encuentro con los medios. El director de cine ucraniano presentará esta noche en el Atlàntida Mallorca Film Fest su película Sobre la historia natural de la destrucción. Un largo compuesto de imágenes de archivo que busca la introspección y el auto-cuestionamiento del espectador sobre su papel en las guerras.

Como también lo intentó con Babi Yar (2021), donde el cineasta retrató el exterminio de 33.000 judíos en un barranco en las afueras de Kiev en 1941. El objetivo del filme fue aprender del pasado, pero, según Serguéi Loznitsa, la historia se repite con los campos de concentración ucranianos. 

Este mismo objetivo perseguirá su próximo proyecto documental sobre la ofensiva de Rusia contra Ucrania. La película pondrá, según ha explicado Loznitsa, el foco en el genocidio: "Dónde nace, las consecuencias que tendrá y cómo la justicia internacional puede poner una barrera. Me interesan sobre todo los crímenes militares que están cometiendo los rusos". 

Sin embargo, el rodaje no dará comienzo hasta que la situación en su país no mejore. La industria cinematográfica, lamenta el realizador, "no vive una crisis, sino una guerra". "Todo está parado. El cine no tiene ningún tipo de subvenciones. Se han detenido todos los proyectos que estaban en marcha. Hay muchas personas de la industria, amigos míos, que han ido a la guerra y han muerto, por desgracia, defendiendo a su país. Muchos compañeros están grabando, documentando, lo que está pasando. En Ucrania vamos a seguir haciendo películas, pero no se sabe cuándo", ha añadido. 

A pesar de las devastadoras consecuencias de esta guerra, Loznitsa sigue manteniendo su postura en contra del boicot al cine ruso: "Hay mucha gente en Rusia, como directores de cine, que están en contra de la guerra. ¿Por qué tenemos que poner los cuernos a esta gente si, en realidad, son buena gente? ¿Por qué no podemos ver las películas de Víktor Kossakovski o Andréi Sviáguintsev si realmente están en contra de la guerra?"

En la Primera Guerra Mundial aparecieron armas de destrucción masiva como los aviones o los misiles. Si hace siglos un conflicto se libraba únicamente entre dos ejércitos, ahora implica la instrumentalización de la población. Sobre la historia natural de la destrucción intenta, según explica el cineasta, cuestionar la moralidad de las nuevas tecnologías de destrucción masiva: "Tenemos que entender que vivimos en otra época donde las guerras (las armas) son diferentes. […] La destrucción masiva no debería utilizarse para ningún fin". 

Serguéi Loznitsa en el marco del Atlàntida Mallorca Film Fest. B.RAMON

La citada película se proyectará hoy en La Misericòrdia en la Gala Ucrania del Atlàntida Mallorca Film Fest. En la misma ceremonia se entregará a Serguéi Loznitsa el premio Master of Cinema, sobre el cual se ha mostrado muy agradecido. Un galardón que el pasado lunes también recibió, en el mismo patio, Neil Jordan

El director presentará, fuera de concurso, The trial (2018) en el Festival de Venecia, un documental de imágenes de archivo sobre el primer proceso en Ucrania a los jerarcas nazis tras la Segunda Guerra Mundial.

Serguéi Loznitsa tiene clara su postura frente a una guerra que sacude Europa: "Hay que aclarar que la guerra es de Rusia contra Ucrania. Hay que hacer hincapié en que Rusia es agresor. [...] La situación es bastante complicada y delicada, en cualquier momento puede explotar".