El paseo del Born de Palma fue ayer un día más una gran librería con la que se pretende captar a nuevos lectores y reencontrarse con otros habituales. Las presentaciones de cuentos infantiles abrieron la jornada en la que los escritores Biel Mesquida, Na Pai, Marta Vives y Antonio Palerm también hablaron de sus últimas publicaciones. Otros acudieron a firmar, como Gabriel Janer Manila con su obra Fantasies eròtiques, y Joana Marcús, quien estuvo dedicando centenares de libros para sus jóvenes seguidores.
Gente curioseando novedades, otros dejándose aconsejar por los libreros, niños buscando libros adecuados a su edad... La Fira del Llibre registró mucha afluencia, pero todavía es pronto para saber cómo irá esta 40 edición ni cuáles serán los libros más vendidos, dejó claro ayer Álex Volney, presidente del Gremi de Llibreters de Mallorca.
En esta feria, cada librería decide qué libros va a poner a la venta teniendo en cuenta el criterio personal de los libreros y la potencial demanda del público, tal como comentó Gloria Forteza-Rey, responsable de Embat. «Hay cuentos infantiles, hay libros para el gran público, hay libros como el del juez José Castro, sus memorias, y el último de Jorge Dezcallar, que es sobre geopolítica... Tenemos que compensar nuestro gusto personal, pero también el del público, de aquel que no pisa cada día las librerías», explicó. A la hora de seleccionar las obras que esta librería llevará al Born también se tiene en cuenta y «muy presente» si se cumple algún centenario del nacimiento de un autor, es el caso de Gabriel Ferraté, de Joan Fuster o de Pier Paolo Pasolini , o el de alguna publicación, como el Ulises de James Joyce. «Este año, además, celebraremos el cuarto Bloomsday con motivo de este centenario y hemos traído una representación de las obras de Joyce», añadió Forteza-Rey.
Otra de las veteranas en esta Fira es Marian Colom, de Llibres Colom, librería con más de 50 años de historia. Su responsable, tras haber faltado a un par de ediciones, afirmó que los libreros deben participar en esta Fira, que les sirve de escaparate: «Tienes que estar, pero no es que nos compense económicamente. Hay que hacer el esfuerzo», comentó en referencia a las fechas de esta muestra, que se celebra relativamente cerca del Día de Sant Jordi. Pero en el Born, «hay gente que no entra nunca en las librerías y los días que te encuentran en la calle, se animan», dijo, aunque también remarcó que «la gente pasea más que compra».
Tras haber pronunciado el pregonet para los niños el viernes por la tarde, Caterina Valriu repetía ayer presencia en la Fira, para firmar ejemplares de sus libros. Muy cerca, en una de las carpas, Biel Mesquida mantenía una divertida conversación con Mateu Coll sobre su último libro, Encarnacions, para disfrute de los asistentes. El escritor y poeta se declaraba amante de los preludios, «la vida es un preludio continuo» y alababa el posfacio escrito por su colega Sebastià Perelló. «Como lector de mi propio libro, después de leer el posfacio, descubrí cosas que no sabía que existieran en el libro», exclamó Mesquida.
Por la tarde, la periodista Marta Vives disertó sobre su libro Diguem-ne Amor, una recopilación de testimonios de parejas y amigos sobre las múltiples formas de querer. Vives reúne «doce historias que, sin ser extraordinarias ¡nos parecen tan reales!», recalcó la periodista Neus Albis en su presentación. Algunas de las experiencias tienen como escenario Mallorca, una isla que «forma parte de mí», señaló la autora.
