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Entrevista
Samantha Hudson Artista

«No soy una chica de medias tintas: o me convierto en clásico o en serie B de culto»

Samantha Hudson posa en las oficinas de Subterfuge, la discográfica con la que saca su nuevo álbum.

Parece llevar con la misma naturalidad que las pestañas XXL eso de ser un icono ‘queer’. Una personalidad, por cierto, que se gestó en las Navidades de hace seis años, cuando las miradas inquisidoras de unas feligresas en una iglesia llevaron a Iván González a protagonizar esa irreverente declaración de principios que supuso el proyecto escolar ‘Soy maricón’. Ahora, tras pasar por ‘Mastercherf celebrity’ y publicar el disco ‘Liquidación total’, se convierte en la reina de las fiestas de Atresplayer Premium 

Conociéndola, Samantha, el especial Una Navidad con Samantha será muy transgresor y petardo.

Sí, es a lo que estoy abocada. Por suerte o por desgracia, Jesucristo Superstar me ha dejado esta miseria y una hace lo que puede con lo que tiene.

Que la llamaran Los Javis no le provocaría taquicardia alguna porque ya los había tenido como jefes en ‘Veneno’.

Ellos me propusieron hacer algo y se les ocurrió un especial navideño. Entonces hicimos brainstorming y sacamos el esquema de la narrativa, un trabajo conjunto con Alejandro Marín, el director, y Jesús Díaz Morcillo, que ha hecho el guion. Aunque yo he puntualizado y moderado diálogos para que quedase más 100% Samantha Hudson. Pero esto es un ecosistema de todas.

Es una historia dickensiana. Un cuento de Navidad con moraleja.

Sí. La historia empieza con que yo me caso con Arturo Valls y somos la pareja de moda. Entonces él sufre un terrible accidente y me convierto en la viuda de España e intento relanzar mi carrera haciendo un especial navideño. Es un metaespecial: un especial navideño dentro del propio especial. Y comienza un viaje con la visita de estos tres tres fantasmas de las Navidades pasadas, presentes y futuras, que me van recordando cuáles son mis orígenes, qué futuro me augura si sigo siendo tan tirana y déspota y por qué trato con tanta prepotencia a las personas que me lo han dado todo. Todo esto, por supuesto, repleto y desbordado de unos cameos estelares y unos modelos imposibles.

La Navidad propicia los excesos. También en los atuendos. En su caso no sé si es posible más.

Habrá más excesos. Si cabe, porque una ya es bastante barroca.

¿Y quién ha hecho el casting de invitados, que van de Amaia Romero a Supreme de Luxe?

Los invitados los escogí yo. Ellos me iban proponiendo también en ese brainstorming tan espléndido, pero yo he hecho bastante una criba. Porque yo quería que fueran superestrellas, pero las que existen dentro de mi propio firmamento. Una puede aspirar a un mainstream, pero para mí lo mejor que hay en España es Manuela Trasobares, Pepe Viyuela y este amplio etcétera de personalidades deslumbrantes que pueblan y plagan el esepecial Una Navidad con Samantha Hudson. Ha quedado un imaginario 100% genuino.

¿Se han adaptado bien a su histriónico universo?

Yo soy muy ofrecida, muy entregada y mi universo es muy agradecido. Además. todas ellas son unas profesionales de tomo y lomo, con lo que ha sido muy fácil. De hecho, he sido yo la que se ha tenido que adaptar, porque me he hecho la supergimcana de los rodajes y ahora ya estoy curtida en mil batallas. Que tiemble Penélope Cruz, que voy a por ella.

Antes, el especial clásico de la Navidades era el de Raphael en TVE-1. Las plataformas lo están cambiando todo. ¿Algún día llegará a serlo el suyo?

A eso aspiro. Yo no soy una chica de medias tintas. Me gustan los extremos y las cosas claras. Con lo que o me convierto en un clásico o en una serie B de culto. Las dos vertientes me parecen fantásticas. Que luego sea el público el que decida.

Si hace otro especial el año que viene, ¿le gustaría contar con él?

Si él quiere... Aunque a mí el que me gusta mucho es Camilo Sesto. Pero ese ya es imposible. No obstante también está Marta Sánchez en el especial y no es ella. Con lo que puedo poner a Camilo Sesto. Mira Whitney Houston, que canta en holograma...

¿Qué recuerdos tienes de las Navidades pre-Samantha Hudson, antes de su gran salida del armario con un videoclip?

Soy maricón ocurrió precisamente en estas épocas tan festivas y fue mi regalo de cumpleaños al Rey de Reyes. Espero que le gustara. Las Navidades pre-Samantha Hudson fueron bastante sencillas. Muy familiares. Yo siempre digo que soy una chica normal. Casi chica y casi normal. Y no lo digo de broma. Suena a una sentencia estrafalaria, pero nada más lejos de la realidad. Yo me juntaba con mis abuelas y me tiraba comiendo mantecados y altramuces hasta que llegaban los Reyes Magos. Luego ciertas personas han ido desapareciendo y nada es lo que era. Pero hay que abrazar el cambio. Y no hay que autocompadecerse ni ponerse triste. La vida es muy injusta y las cosas suceden como suceden. O te haces cargo o te quedas estancada. Y yo soy muy moderna para quedarme estancada.

Lo importante es tener familia con la que celebrar.

Al menos estoy agradecida que a día de hoy me lleve tan bien con mi familia y siga pudiendo juntarme con ella. Porque estas fechas son muy complicadas para mucha gente. Sobre todo para el colectivo LGBTI, que no tiene tan buena relación y no dispone de esa suerte. De cualquier manera, y algo muy bonito que tiene este especial, es que no hace mención a la familia carnal ni a los lazos de sangre. Porque también las amigas son unos vínculos estupendos y, al final, lo importante es que estés rodeada de un entorno que lleve a cabo estas dinámicas de cuidados tan fundamentales y que te acepte y te quiera como tú realmente eres. Que al final esa es la moraleja de la vida.

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