Es el grupo del momento. Tanxugueiras conquista el panorama musical con su apuesta por la música tradicional gallega, pero en la que también hay espacio para el autotune. Participarán en el Festival de Benidorm, de donde saldrá el representante de Eurovisión, después de sentir el apoyo de los eurofans en las encuestas previas. Sabela Maneiro hace un repaso al último año, lo que está por venir y lo que necesitan las nuevas generaciones para respetar y amar su cultura.

Llevan casi tres años, con pandemia incluida, con Contrapunto. ¿Cómo es decir adiós a esta gira?

La verdad es que da mucha pena, porque fue un disco y una gira que hicimos con muchísimo cariño a pesar de los obstáculos que pudimos tener. Pero, a la vez, también estamos contentas de abrir otra puerta y empezar otra gira en marzo. Son sentimientos encontrados entre alegría y tristeza.

¿Qué tienen preparado?

Estamos trabajando en el disco y en un directo que esté al mismo nivel que cualquiera de los que se están escuchando hoy a nivel estatal. Que se cante en gallego no significa que no tenga que tener ese nivel.

¿Serán diferentes los directos de 2022?

No vamos a perder nuestra esencia, va a ser música tradicional, pero vamos evolucionando y dando un paso más. Queremos acercanos a los más jóvenes, que son los que van a hacer que esto perdure en el tiempo. Es necesario que cojan el testigo las nuevas generaciones. Si están desconectadas, va a llegar un momento en el que esto desaparezca. Si conectamos a las nuevas generaciones, esto va para largo.

Tanxugueiras es el ejemplo de que la tradición vuelve para reivindicar el lugar que merece.

La tradición vuelve para quedarse. Intentamos hacer visible la música tradicional, pero vuelve para quedarse porque estamos haciendo cantera, nosotras y nuestros compañeros. Ahora lo único que queda es ir para arriba.

Realizan actividades en colegios para fomentar la música tradicional gallega con canciones y juegos. ¿Qué necesitan niños y niñas para conocer su cultura?

Yo creo que en el colegio, no solo en las actividades extraescolares, tenían que enseñar eso. Es nuestra cultura, nuestra tradición y nuestra historia. Hay que informar más. Vamos por los colegios y hay niños que no tienen ni idea de lo que tenemos aquí. Deberían hacer una asignatura o clases para que los niños conozcan lo que tienen sino tienden a olvidarlo, porque no conocen, no están arraigados. Nosotras, por ejemplo, tuvimos suerte de sentirnos partícipes de nuestra cultura. Es nuestra identidad. Si no hacemos partícipes a los niños y niñas de que es su cultura y de que tienen que amarla, respetarla y cuidarla, no tienen ese arraigo con ella. Es normal.

¿Qué encuentran en esas visitas?

Los niños están encantados. Descubren, por ejemplo, que les mola la pandereta. Se sorprenden. Hablamos sobre el gallego, sobre la diversidad lingüística y de que hay que cuidar lo nuestro. Es una pena esa realidad de que los niños se avergüencen de hablar gallego o tocar un instrumento como el nuestro. Intentamos, dentro de lo que podemos, que eso no suceda.

Es curioso que es lo haga un grupo de música.

Pues sí. Tendría que haber una base. Los niños son esponjas y, en muchos casos, no saben.

Y así Tanxugueiras es un referente para muchos. ¿Son conscientes?

Pues sí. Notamos esa responsabilidad pero tampoco es nuestra. Somos conscientes de que tenemos un altavoz y que tenemos que usarlo de alguna forma, pero no nos metemos mucha responsabilidad. Esto es algo de todos. Para muchas niñas somos su referente, pero nosotras somos lo que somos, somos personas, no podemos asumir la presión de ser referente de una niña que está por descubrir el mundo y que cualquier cosa que puedas decir puede influir.

¿Cuál fue su referente?

Las Leilía. Eran mujeres empoderadas que fueron las primeras en subirse a un escenario tocando una pandereta. Era la primera vez que no acompañaban a ningún gaitero, tocaban su propio repertorio.

En febrero salió 'Midas', una canción con bases electrónicas y autotune. ¿Cómo surgió?

Nosotras escuchamos todos los estilos de música y eso se refleja en las creaciones. Escuchamos Nathy Peluso, María José Llergo, Rosalía, Rodrigo Cuevas... Nos empapamos de todo eso, no tenemos prejuicios. La música es música y el contenido de las letras es lo que diferencia si vale o no vale.

¿Sonará así el nuevo trabajo?

Estamos caminando hacia una dirección muy clara. No nos vamos a olvidar de lo que somos y sacaremos temas más tradicionales, pero tenemos muy claro que esta es la línea que queremos seguir y la que va a llegar a los más jóvenes. Tenemos una meta, que es llegar a cuanta más gente mejor, y atrapar a cuantos más niños y niñas mejor.

En ese camino por enseñar su música y llegar a más sitios, los eurofans apostaron por Tanxugueiras en una encuesta para ir a Eurovisión. ¿Cómo fue ese momento?

Muy gracioso y de incertidumbre. No sabíamos lo que estaba pasando. Estamos muy contentas de ser las ganadoras de esa encuesta con tantos artistas como había. No hay que olvidar que fue el público quien nos eligió. Fue una sorpresa. Vimos todos por Twitter.

Participarán no Festival de Benidorm, en la elección de quien irá a Eurovisión. ¿Qué tienen preparado?

Una canción empoderada, más nosotras que nunca y con ritmos que pueden llegar al público, pero sabiendo cual es el mensaje que queremos transmitir.

¿Piensan en la posibilidad de representar a España en este festival?

No cerramos puertas. Son cosas improbables, no imposibles. Siempre decimos que la guerra se hace desde dentro. Ir a Eurovisión sería algo muy bueno para la música gallega, para las pandeireteiras, para la música tradicional, para las lenguas cooficiales y para muchas cosas. Si nosotras somos ese trampolín para que se nos respete y se vea que hay más música de raíz en España, no solo el flamenco, y para que se respeten las lenguas cooficiales, bienvenido sea. No solo es un grupo en gallego cantando en gallego, es que la música tradicional esté ahí y que se baraje por el público que podamos ir a Eurovisión, es un logro. Las cosas están cambiando y tenemos una responsabilidad con Galicia, con nuestra gente y con nosotras mismas. Presentamos la canción y ahora ya no depende de nosotras.