La actriz Penélope Cruz, que presentó ayer en Madrid la nueva película de Pedro Almodóvar Madres Paralelas, aseguró «no entender» decisiones como la del reciente Festival de San Sebastián de eliminar la distinción de sexo en sus premios de interpretación.

«Me encanta el Festival de San Sebastián y el trabajo que hace José Luis Rebordinos (director del certamen), pero no estoy muy de acuerdo con esa decisión. No consigo entender en qué ayuda a nadie», señaló la actriz al ser preguntada por la polémica.

En cualquier caso, Cruz ha reiterado que se trata de una «opinión personal» y desconoce «si luego todos los festivales irán por el mismo camino o de momento solo son dos» -en esta edición del Festival de San Sebastián, el premio ha recaído en dos actrices ex-aequo, Flora Ofelia Hofmann Lindahl y Jessica Chastain-.

Cruz, primera actriz española en conseguir un Oscar y una Copa Volpi, ha reconocido que todavía disfruta con que los premios le «sigan sorprendiendo y emocionando como la primera vez». «El primer premio que me dieron fue con mi nominación al Goya por Jamón, Jamón y lo viví con muchísima ilusión», recordó.

Sobre sus posibilidades de lograr un nuevo Oscar con este trabajo, señaló que lo afronta «sin aspirar a nada y, luego si pasa, es una gran alegría y sorpresa». «En Venecia me eché a llorar, porque por mucho que te digan que va a pasar es muy difícil. Estas cosas son lo que son, ni hay que darle importancia ni quitársela. Pero claro que se vive con ilusión y agradecimiento», remarcó.

Tras varias colaboraciones con el director manchego, afirmó que le «sigue encantando» escuchar la etiqueta de chica Almodóvar. «Me encanta cuando me lo llaman, era mi sueño desde niña», apuntó, una afirmación que también comparten sus compañeros de reparto, casualmente todos ellos debutantes con el realizador de Hable con ella.

En el caso de Israel Elejalde, incluso se ha llevado con humor el término al lenguaje inclusivo. «Huyo de las etiquetas porque no es algo que me guste especialmente, pero si tengo que tener una, chico o chique Almodóvar me parece estupenda y la llevo con mucho orgullo», apuntó.

Para Aitana Sánchez-Gijón resulta «un privilegio» el trabajo con Almodóvar, «sobre todo ya a estas alturas de carrera». «Creo que ya llevamos una trayectoria de muchos años y afrontas esto como un regalo: la guinda del pastel. Si me hubiera pillado más jovencita no lo habría llevado con tanta ligereza», destacó.

Para Milena Smit, supone «un halago» que Almodóvar haya apostado por ella después de su debut con Mario Casas en No matarás. «He tenido la suerte de que uno de los mejores directores del mundo quiera contar contigo en un proyecto y eso es un auténtico regalo. Para mí ha sido algo mágico», resaltó.

En Madres paralelas está de fondo la memoria histórica en España, algo que Cruz considera que «más que un debate, debería ser un derecho para las familias».