El Art Palma Summer nunca ha gozado del tirón de la Nit de l’Art, pero este año ha tenido un significado especial: la sensación de cierta normalidad. Así lo cree Frederic Pinya, el presidente de Art Palma Contemporani, la entidad organizadora de este evento en el que las galerías abren simultáneamente con nuevas exposiciones para celebrar el inicio artístico del verano.

«Ha sido importante porque ha supuesto un reencuentro con mucha gente que hasta ahora no se atrevía a venir a las galerías», explica Pinya, quien comenta que la tarde arrancó más tranquila, con la visita también de políticos, como la presidenta Francina Armengol, el conseller de Cultura Miquel Company y la directora general Catalina Solivellas. «Al final ha ido viniendo más público, caras que teníamos ganas de volver a ver y también muchas personas que tienen casa en la isla y al fin han vuelto», relata Pinya, quien cree que el formato del Art Palma Summer es «pausado como el del Brunch, pero muy interesante».