A muchos artistas, el tema de la pandemia y del confinamiento les ha perjudicado en exceso. No parece ser su caso, pues está viviendo una época dorada y llena de éxitos. ¿A qué se debe?
Sí, es cierto. A muchos compañeros se les han cancelado actuaciones y grabaciones discográficas, pero no parece ser mi caso. Creo que la causa es el formato en el cual me muevo: pequeño y con música relajada, que no invita al baile, más bien a escucharla de forma reposada.
El pasado mes de septiembre sacó el disco Fins a maig no revisc. ¿Es usted como las flores, que en mayo llegan a su esplendor?
(Ríe) No sé si puedo considerarme una flor, aunque sería hermoso tener épocas del año en las que floreces. El título refleja el hecho de que todos tenemos momentos hermosos, primaverales. La primavera es, para mí, una gran época. También quiero indicar que siempre, por duro que sea, hay tiempo para la remontada.
De hecho, el disco se grabó al inicio del confinamiento, hace ahora un año.
Justo antes del confinamiento más duro terminamos la grabación. Ahora bien, antes de meternos en el estudio hicimos un gran trabajo de preproducción que facilitó mucho las cosas. Una vez grabado, llegaron las restricciones y el productor se confinó en el estudio, con lo que pudo trabajar y conseguir lo que el disco es. Incluso algunos retoques se hicieron durante la fase 1 del confinamiento: grabamos los coros para el tema Fuig i no me toquis, ocho voces, cada una en su casa y a través de los móviles. El resultado es curioso.
Ha contado con un productor que a su vez es músico de renombre, Pau Vallvé.
Ha sido una suerte. Pau es también músico, todo un referente para mí. El disco sería otro sin su aportación, que es mucha.
En algunos círculos se clasifica su música de folk acústico, ¿le parece bien esa denominación?
Creo realmente que lo que hago es pop a mi manera y con influencias del folk, sin duda. Ahora bien, lo de acústico será por ir acompañada de guitarra. Si empecé con el folk, ahora me estoy alejando de ese movimiento.
¿Se considera una artista indie?
Si indie significa estar alejada de los movimientos comerciales y al uso, quizás sí soy una artista indie, ahora bien, tenemos la manía de etiquetar y no siempre se acierta. Mi música, mi estilo, es más intimista. Mis canciones hablan de cosas que me pasan a mí. Sin duda el disco tiene mucho de Maria Jaume.
¿Con influencias de, por ejemplo, Julia Jackin, Stella Donnelly, Angel Olsen?
Sí, esas son influencias directas. Son referentes de mujeres con mucho talento. Me identifico con ellas, ahora bien, no significa que haga lo mismo que ellas, exactamente.
¿Y dónde situamos a Nick Drake? ¿Qué hay de él en sus composiciones?
Drake me tocó plenamente ya desde la primera vez que lo escuché. Me regalaron un disco suyo y nada más escucharlo empecé a llorar y a sentir algo especial. Drake transmite porque es muy natural. Este sí fue indie, ya que se movía fuera del sistema.
De todas maneras el cantautor birmano no es un referente para la generación como la suya de poco más de veinte años.
Ciertamente, no lo es. Incluso diría que lo conocen muy pocos jóvenes de mi generación. En eso me diferencio de la mayoría.
¿Y Joan Miquel Oliver?
Nací con Antònia Font. Sus canciones me han marcado desde que era un bebé. Desde muy niña cantaba sus temas. Oliver, su estilo, sí me ha marcado profundamente. La manera de componer, las letras, todo lo de Antònia Font está en mi manera de hacer música.
¿Qué significó ganar el concurso Sona 9?
Sobre todo poder tener la oportunidad de grabar un disco. Eso fue lo mejor.
¿Y participar en el último Primavera Sound, aunque fuera en streaming?
Aquello fue una cosa especial, era una de las primeras actuaciones que se hacían después de las etapas de restricciones. Resultó extraño saber que mucha gente te escucha pero no ves a nadie. Agradable pero agridulce al mismo tiempo.
¿Incorporaremos el streaming a nuestra vida cotidiana?
No soy muy partidaria de que así sea. Me gusta el contacto, la presencia, poder mirar a los ojos, disfrutar de la presencia. Con la retransmisión digital se pierden esas cosas, falta la calidez, la brasa, la sensación de que alguien te escucha.
El video clip de la canción Terra banyada está dirigido por Aina Martos, otra mujer joven que empieza a destacar.
Aina es amiga desde el instituto. He compartido muchas cosas con ella. Me conoce. Y como tiene mucho talento, aunque nunca había dirigido un videoclip, cuando se lo propuse se volcó rápidamente en el proyecto. Fue un rodaje curioso, todo el equipo éramos mujeres de poco más de veinte años.
Y las fotos que aparecen en el disco, empezando por la portada, no parecen en absoluto gratuitas ni puestas al azar, más bien dan a entender un mensaje a través del cuerpo.
Realmente es así. Todo está muy pensado. Quería imágenes que no dieran la sensación de que todo es maravilloso. De todas maneras y como dice el título del disco, siempre hay épocas para el florecimiento.
Le voy a proponer que califique con pocas palabras algunos temas del disco: Terra banyada.
Crudeza.
Autonomia per principiants.
Independencia.
Quan me respires.
Sensualidad y disfrute.
Forces estranyes.
Impotencia.
Fuig i no me toquis.
Alegría.
Empezó Antropología en Barcelona ¿Ha dejado los estudios o los ha aparcado por un tiempo?
Me gustaría, en el futuro, seguir con esos estudios, pero ahora me centro en la música. Voy a estudiar en el conservatorio del Liceu y no puedo pensar en otra cosa, al menos por el momento.
¿Será el concierto de mañana la presentación del disco o podremos escuchar algo más?
Si bien la mayoría de temas que vamos a tocar son los del disco, voy a interpretar alguno nuevo, ya que me interesa también dar a conocer el poder de la banda que me acompaña: Núria Graham a la batería y Mara Espinosa al bajo.
