La obra L’atelier aux sculptures de Miquel Barceló es el cuadro de un artista español más emitido por los telediarios e inmortalizado en las secciones de política de los periódicos y digitales. Este hecho, el de presidir la sala de la Moncloa donde se celebran los consejos de ministros, ha irritado al artista mallorquín, que declaró en el diario El País el pasado domingo que se había transformado en «un decorado». «No es el lugar adecuado. Me gustaría que estuviera en el museo [Reina Sofía]. Mi cuadro no está hecho para estar de fondo de un señor [Pedro Sánchez] que le da la espalda ni para pasarlo por la tele», declaró en referencia a la apropiación política de esta magnífica pintura de 1993.

El taller de esculturas de Barceló no es la única obra del artista más cotizado del país que ha sido víctima del apropiacionismo político en la Moncloa. En estos momentos, hay cinco barcelós en la sede de la presidencia del gobierno. Cinco obras del artista mallorquín que son también depósitos del Museo Reina Sofía.

El famoso L’atelier, con unas dimensiones de 235x375 centímetros, ingresó en el centro de arte madrileño el 26 de enero de 2001. El modo de adquisición fue la compra a la galería Bruno Bischofberger de Zurich. «Es casi un trozo de pared, como en Altamira, con relieves, salientes y abultamientos. Está hecho para vivirlo, para estar ante él, mirándolo», declaró el pintor de Felanitx sobre el cuadro.

Esta obra se depositó en Moncloa el 30 de enero de 2020 (con el segundo gobierno de Sánchez) por un periodo de cinco años renovables, explican a DIARIO de MALLORCA desde el Reina Sofía.

De otra pared de la misma sala del consejo de ministros, pende una aguatinta (la XIX) de la serie Lanzarote, que consta como una donación, e ingresó en los fondos del museo en septiembre de 2001.

Según el Reina Sofía, estas son las dos únicas obras de Barceló que están en la sala del consejo de ministros, pero no descartan que pueda haber alguna más de las siguientes «porque se hayan cambiado de sitio».

Encuadrament amb plat de raïm, de 1992, también consta como depositada en La Moncloa. Esta pintura se compró también al galerista Bruno Bischofberger de Zúrich. La técnica es pintura acrílica muy matérica, con relieves, cargas y materiales añadidos. Este lienzo se depositó en presidencia del gobierno el 26 de marzo de 2010. El contrato también es de cinco años con posibilidad de prórroga.

En la misma situación se encuentra el cuadro El pintor animalista, de 1993. Con unas dimensiones de 2,35x2,85 metros. La pieza es un depósito de Soledad Lorenzo e ingresó en el museo en el año 2014.

La última pieza del felanitxer que está bajo techo presidencial es la escultura de bronce Animal de pintor, que fue donada por el galerista suizo cuando se compraron las dos obras anteriores. Esta pieza (48x70 cm) entró por las puertas de la Moncloa el 30 de enero de 2019.

En estos momentos, el Reina Sofía cuenta en sus fondos con 55 obras de Miquel Barceló: 12 pinturas, tres esculturas y 40 piezas de arte gráfico. Además de las cinco obras anteriormente citadas y explicadas, todas ellas depositadas en la Moncloa, hay otro barceló en el Ministerio de Presidencia (otra aguatinta de Lanzarote, la número XX) y dos obras más del mallorquín en el Consejo de Estado, también aguatintas de la serie anteriormente citada.

Campano y Sicilia También bajo techo presidencial

En la Moncloa, también hay obras depositadas de otras instituciones. Patrimonio Nacional ha prestado dos pinturas: una de Campano y otra de José María Sicilia, dos artistas vinculados a Mallorca, en concreto a Sóller, donde pintaron y tuvieron su taller. El Reina Sofía también depositó en la sede presidencial una obra de Soledad Sevilla que forma parte del legado de Soledad Lorenzo al museo como promesa de donación.