Un total de 150 alumnos se sometieron durante la jornada de ayer a las pruebas de acceso al Conservatori Professional, exámenes que se prolongarán durante las próximas tres semanas y que sirven de ensayo sanitario para el curso que comenzará el próximo 5 de octubre y que estará marcado por un elaborado y cuidado plan contra la covid-19.

Son tres los tribunales que califican las aptitudes de los estudiantes, que tienen que entrar solos al centro, sin el acompañamiento ni de familiares ni de otras personas. Al margen de las partituras, el gel y las mascarillas también son protagonistas.

A la convocatoria de la mañana se presentaron 75 aspirantes, que tuvieron que enfrentarse a un ejercicio de una materia troncal, lenguaje musical (prueba escrita, teoría y dictado). Se organizaron en tres aulas grandes respetando en todo momento los 1'5 metros de separación, mascarilla y gel hidroalcohólico. Otros cuatro alumnos realizaron la prueba de música de cámara.

Ya por la tarde, las pruebas se centraron en las especialidades instrumentales del mismo nivel educativo: armonía, historia de la música y danza clásica. No hubo que recalcar ninguna incidencia durante toda la jornada.

Son 500 los aspirantes para ocupar una de las 150 plazas que ofrece el Professional. El curso en el centro arrancará con unos días de retraso, a causa de la pandemia, el 5 de octubre. Se limita el uso de vestuarios y ascensor, y se cierran fuentes, al ser posibles focos de infección.