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Conservatorio

Danza sin contacto y música con mascarilla

El lunes tendrá lugar el primer ensayo sanitario con el inicio de las pruebas de acceso, a las que se presentan 500 aspirantes para 150 plazas

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Danza sin contacto y música con mascarilla

El Conservatori Professional, centro público de referencia para las enseñanzas artísticas de régimen especial en música y danza de Mallorca, empezará a impartir sus clases el 5 de octubre, con unos días de retraso a causa de la covid-19, por la que se suspendieron unas pruebas de acceso que, programadas en principio para el mes de junio, se desarrollarán durante tres semanas, a partir del próximo lunes. El presente curso contará con un millar de alumnos matriculados y se seguirá un cuidado Plan de Contingencia -aprobado por unanimidad el pasado mes de julio por el Claustre y posteriormente por el Consell escolar- para preservar la salud de los usuarios, un auténtico "reto", en palabras de su director Josep Romero. El uso de mascarilla por parte de alumnos y profesores, el cumplimiento de las distancias de seguridad sanitarias ?de entre 1,5 y 3 metros?, las limitaciones en el uso del ascensor y los vestuarios, y la danza sin contacto físico entre bailarines son algunas de las medidas establecidas.

"El estado de ánimo entre los cerca de 120 profesores y el resto de personal del Conservatori es de incertidumbre, porque vamos a lo desconocido. Este curso es un reto pero estamos preparados. Nuestro objetivo es que los alumnos aprendan lo mejor posible, intentando minimizar los riesgos de contagio en las instalaciones y ante las situaciones que vayan surgiendo, buscar soluciones. En el equipo directivo reina la ilusión", asegura Romero.

Las pruebas de acceso que se inician el próximo lunes supondrán el primer ensayo en materia sanitaria. Se presentarán 500 personas, aspirantes a 150 plazas, y además se desarrollarán las pruebas para la obtención del certificado elemental, dirigidas a alumnos que han cursado estudios de enseñanzas elementales en escuelas y academias no regladas y quieren regularizar esos conocimientos. Como medida excepcional este año se ha dado cita a modo de consulta con un médico especialista, es decir, por franjas horarias, para las pruebas de carácter individual, con el fin de evitar aglomeraciones.

Precisamente para evitar aglomeraciones y garantizar que se mantenga una distancia de seguridad el acceso y la salida del centro se hará durante el curso por la misma puerta. Una cinta separa el carril de entrada del de salida. El personal de conserjería controlará quiénes tienen actividades en el centro por lo que no podrá entrar nadie sin autorizacion expresa. "Todas las gestiones que se puedan hacer telemáticamente se harán de ese modo", subraya el director del Conservatori.

Ni siquiera los menores de 10 años podrán entrar acompañados de sus padres u otros familiares. "Se habilitará el servicio de custodia de alumnos, y aunque sean menores ya llevan como mínimo dos años en el centro, lo que significa que conocen el centro, que solo tiene una puerta de entrada y de salida. No se permitirá el acceso ni de padres ni de acompañantes", insiste Romero.

A diferencias de otros conservatorios españoles no se tomará la temperatura corporal con un termómetro a la entrada del centro. Sí se higienizarán las manos con gel hidroalcohólico, no solo al acceder al Conservatori, también al inicio y fin de cada clase y a la salida y entrada a los baños. Se recomienda el uso de mascarillas higiénicas y quirúrgicas.

Los pasillos se han señalizado a doble sentido y unos carteles recordarán la obligatoriedad de circular siempre por el lado derecho, para evitar cruces innecesarios. El auditorio del centro dispondrá de entradas específicas en cada lateral para evitar que las personas que acudan a él se mezclen con el resto de la comunidad educativa. El uso del ascensor se limita a casos de "necesidad absoluta" y se cierran las fuentes, posibles focos de infección. Un apunte: el servicio de cafetería no permanecerá abierto. "Este curso no habrá cafetería, de momento. El que estaba no ha renovado el contrato y se ha sacado a licitación. Si no hay cafetería se habilitarán unas máquinas para agua y algún snack saludable", anuncia la dirección.

En la entrada de cada aula estará señalizado el aforo máximo de la misma, establecido a partir de la distancia de seguridad o los metros cuadrados útiles. Según qué tipo de formación reciba el alumno la distancia va desde el 1,5 a los 3 metros, esta última para las materias de viento, viento-madera, viento-metal y canto o coro. La mascarilla deja de ser obligatoria para instrumentistas de viento-metal y viento-madera. "Los profesores solo se la podrán quitar para hacer algún ejemplo con su propio instrumento", aclaran desde el centro.

La limpieza será estricta con instrumentos que se comparten, como son el piano, el arpa y el contrabajo. "Los profesores de piano, un instrumento que puede contagiarse no solo por el sudor de los dedos, también al hablar, ya que se podrían propulsar gotas de saliva sobre las teclas, tendrán a su disposición hidrogel y unas bayetas de papel para que entre clases froten las teclas como una medida más de seguridad", explica Romero.

Prohibido el paso a dos

La danza se someterá a un protocolo especial: el alumnado de danza elemental tendrá que venir vestido de casa y se dirigirá directamente a su aula; la mascarilla será obligatoria y solo se podrá quitar si dificulta la respiración y se mantiene la distancia de seguridad establecida, en este caso de dos metros; las botellas de agua y las toallas también se traerán de casa y en ningún caso se podrán compartir; y la ropa utilizada deberá lavarse diariamente a 40 grados. Además, las ventanas y puertas podrán permanecer abiertas durante la clase y será responsabilidad del profesorado la limpieza de las barras de ballet con gel al concluir su clase. Los músicos acompañantes tendrán que limpiar sus instrumentos antes del inicio y al acabar las clases y siempre lavarse las manos.

El paso a dos ( pas de deux), aquel que se realiza conjuntamente por dos personas, no estará permitido. La asignatura de danza clásica, en este sentido, se ha replanteado. "Evidentemente no podrá existir contacto -subraya el director-. Está la posibilidad de hacer un trabajo técnico específico sobre el paso a dos y de manera figurativa, sin que haya contacto entre bailarines. Si algún profesor nos solicita maniquíes atenderemos esa petición".

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