Extraños. Así define Álvaro Urquijo, voz cantante de la mítica banda madrileña Los Secretos, los conciertos de la era covid-19. La banda, que completan Ramón Arroyo, Txtetxu Altube, Juanjo Ramos, Jesús Redondo y Santi Fernández, ya ha ofrecido varios shows durante este verano, y el próximo sábado, 5 de septiembre (22 horas), desembarcan en la isla para ofrecer en directo su música en Port Adriano. Aún así, Urquijo señala que ellos tienen ventaja: "Durante el invierno, nosotros ya trabajamos en recintos con gente sentada, en auditorios o teatros, y ya estamos acostumbrados a ello y a enfrentarnos a un espectáculo en el que la gente no se puede levantar". Pero hay algo raro, diferente, que falla: "A los artistas, cuando estamos sobre el escenario, nos ayuda mucho mirar a la gente y ver su gesto, cuando te sonríen y les brillan los ojos descubres que lo estás haciendo bien. Con la mascarilla, esta comunicación falla, no es tan intensa", explica el cantante, que promete un show con un repertorio de más de 30 canciones de todas las épocas de la banda, con matices y sonidos renovados sin dejar de lado nunca la "sencillez".

En su último disco, Mi paraíso, que se publicó en septiembre del año pasado, la canción que da nombre al álbum reza lo siguiente: Hoy todo me parece un mundo extraño, eso que nunca me iba a ocurrir, quiero encontrar la puerta de atrás del paraíso. Aunque pueda parecerlo, no era una anticipación a la gran crisis que estamos viniendo y a la que vendrá. "Yo lo escribí pensando en el mundo de la música, no entendía como hay gente que tiene millones de seguidores sin hacer nada especial, que utilizan ritmos muy sencillos y repetitivos y que usan máquinas para cantar. Me veo muy alejado de esto", comenta, criticando el funcionamiento del sector musical, con el cual no se siente representado.

La banda se ha mantenido fiel a un estilo concreto, a un universo musical que les caracteriza y les hace reconocibles, con letras y melodías que se mueven entre la ternura, la nostalgia, la sencillez y la frescura, algo por lo que han sido criticados, por sonar igual siempre. No les importa, ellos defienden su música, así es su manera de sonar. Y no les ha ido mal: "Hemos firmado autógrafos a una familia entera en la que había tres generaciones". Su música no tiene edad, aunque muchos se empeñen en decir lo contrario.

"Los Secretos teníamos éxito cuando éramos muy jóvenes, y eso no era lo normal. En un momento dado, la industria nos arrinconó porque hacíamos lo mismo, nos dijeron que la música que hacíamos no tenía futuro". Ahora suman cuarenta años de trayectoria.

Las pérdidas, especialmente la de Enrique Urquijo, pero también las de José Enrique Cano y Pedro Antonio Díaz, han marcado a la agrupación. Sobre su hermano, Álvaro Urquijo dice que "la pérdida se supera y se conlleva toda la vida", y que ahora está feliz de que la obra de Enrique siga viva aunque él no esté: "Sus canciones siguen sonando, y a mí me acercan a él y hacen que lo recuerde mucho. Convivimos con sus letras y con su forma de pensar", menciona.

Aunque a Álvaro Urquijo no le guste hablar de política y se sienta decepcionado con todos los políticos, tiene claro que es necesario que se dediquen más esfuerzos a la cultura, a la ciencia, la educación y la tecnología, que es "lo que nos salvará": "En España llevamos 40 años de retraso en materia cultural, y nadie hablaba de investigación hasta que la llegado el coronavirus", lamenta. Y considera que los políticos están mejor cuando hay más discusiones sociales: "No les interesa arreglar los problemas de la calle", manifiesta el cantante.