Sebastià Alzamora advertía a este diario al inicio del Sant Jordi veraniego -celebrado el pasado jueves- que "no tenemos que ver la literatura en términos de competición" pero reconocía que figurar en las quinielas de los favoritos para hacerse con el título no oficial de libro más vendido "siempre es un honor". Los pronósticos se cumplieron, y el autor de Reis del món, una novela que narra la relación entre dos grandes personajes del siglo XX, antagónicos, el banquero Joan March y el orientalista Joan Mascaró, se alzó con esta distinción.

La lista de los libros más vendidos facilitada por la organización del Sant Jordi de verano se completa con los títulos L'espasa del corsari, de Iolanda Bonet; Mitologia per a profans, de Antoni Janer; Tània i els vius, de Joan Pons Bover; Crònica desordenada de ciutat antiga, de Jaume Oliver; y Els hereus de la ira, de Jaume Armengol.

Las ventas en Palma no estuvieron a la altura de un Sant Jordi típico, el de abril, pero los libreros se muestran satisfechos con los resultados obtenidos. Buenas ventas para la que está cayendo, pero de ahí a repetir la experencia... "Sant Jordi es para el mes de abril", subrayó durante la fiesta la presidenta del Gremi, Maria Barceló. "Hoy no estamos aquí para hacer negocio", señaló, por su parte, el librero Àlex Volney.

Triunfadores en Barcelona

En la Ciudad Condal el Sant Jordi de verano facturó el 25 por ciento del clásico de 2019 pero a diferencia de Mallorca, los libreros sí estudiarán una fiesta de julio estable para el futuro. Entre los más vendidos en Catalunya destacan tres títulos: M'explico. De la investidura a l'exili, libro de Carles Puigdemont; A propòsit de no res, de Woody Allen; y El enigma de la habitación 622, de Joël Dicker. También triunfaron Rafel Nadal (Mar d'estiu) y Pilar Rahola (L'espia del Ritz).