Tras la acción artística de Albert Pinya representando el alter ego de Pep Girbent (Sóller, 1969), la segunda acción que completa este díptico de intervenciones en la Zona Girbent de la galería Horrach Moyà -proyecto inaugurado el pasado mes de mayo en el espacio de Palma, donde el artista solleric ha establecido una de las propuestas con mayor espíritu lúdico de su trayectoria- no dejará indiferente a nadie. El protagonista será Liu Wei (Pekín, 1972), representante de la pintura abstracta, cuya obra ha irrumpido con notable impacto y en un tiempo récord en el panorama artístico internacional.

En septiembre de 2019, Liu Wei anunció una triple participación en la palmesana Nit de l'Art: Recent Paintings, en Horrach Moyà -que fue su primera exposición individual en el estado español-, Hibridacions en el Casal Solleric y Mezzanine en HM Sadrassana; intervenciones y muestras que obtuvieron un notable éxito de crítica y público, según recuerdan los responsables de la galería Horrach Moyà.

El relato que se plantea ahora en la Zona Girbent es el siguiente: Liu Wei no existe. Se trata simplemente de un producto de la imaginación y el espíritu lúdico de Girbent, un avatar a través del que el artista ha liberado una genuina pulsión por pintar abstracto. Así, el trabajo del pintor abstracto será llenar un espacio en blanco partiendo de la base que es una parte de la cabeza de Girbent, un ejercicio artístico propuesto por el solleric. La intervención del pintor chino tendrá lugar hoy a partir de las 10 horas.

Fue Albert Pinya quien, el sábado pasado, se convirtió en un alter ego de Girbent, dionisiaco, provocativo y canalla, que veinte años atrás escogió como expresión el grafiti y el arte urbano, y que destaca como muralista.

Este proyecto surge de la necesidad de Pep Girbent de huir del cubo blanco, inmaculado, simple contenedor de obras en el que no ocurre nada, y tejer así complicidades con otros artistas, hacerles salir de su zona de confort, y verse también como artista en otros cuerpos.