Jaume Reus, exdirector del Institut d'Indústries Culturals (ICIB), cargo del que fue destituido el pasado mes de septiembre, ha recuperado "la ilusión" después de "pasar página" de un episodio que tilda de "decepcionante" y afrontar un nuevo proyecto como vencedor del concurso de contratación de comisariados 2020 del Casal Solleric.

Las propuestas expositivas de Jaume Reus y Adonay Bermúdez han sido elegidas como vencedoras de un concurso al que se presentaron 13 proyectos, en el caso del comisariado para el Espai Dipòsit, y 17, en el reservado a planta baja y entresuelo. El jurado lo integraban la mediadora artística Irene Amengual, la artista y comisaria independiente Mery Cuesta y el también comisario Pau Waelder.

Según explicó ayer Reus, elegido por su proyecto Performar Dipòsit. Adultcentrisme i saliva, concebido junto a los artistas Javier Peñafiel y Gabriel Pericàs, su propuesta se fundamenta en la performance y en la "voz como materia escultórica", para desarrollar una crítica al adultocentrismo, entendido como la hegemonía que mantienen las personas adultas, las que ostentan el poder, sobre los niños, jóvenes y adolescentes.

El proyecto de Peñafiel, que tomará forma a partir de mayo, se presentará a través de un taller, Ignorancia del odio, planteado como un ejercicio de búsqueda con jóvenes activistas ante la crisis climática. Por su parte, la propuesta de Pericàs, que pone el énfasis en la idea del Espai Dipòsit como cavidad bucal, como "cueva húmeda", llegará al visitante mediante dos videoinstalaciones, la primera centrada en una exploración de la materialidad de la saliva y la segunda, dedicada a la acción de escupir, "un gesto un poco punk para hablar de forma y textura", apuntó Reus.

"Estoy con mucha ilusión cada vez que empiezo un proyecto. Para mí competir en igualdad de condiciones con una opción tan democrática y transparente como esta me parece enriquecedor", confesó Reus, ya recuperado de un cese sobre el que ha "pasado página".

"Tuve una decepción por cómo se me trató en el poco tiempo que tuve para trabajar el nacimiento de una nueva institución [el ICIB], y además sin personal. No se puede pedir demasiado más en seis meses y con unas elecciones de por medio. Fue decepcionante la manera cómo Pilar Costa y Catalina Solivellas me trataron", recordó.

Por otra parte, el comisariado para la planta baja y el entresuelo del Solleric lo ganó Adonay Bermúdez (Lanzarote, 1985), ausente ayer en la presentación, por un proyecto, 2022, Under Destruction, que trabaja conceptos como el alquiler turístico o la transformación de Palma.

CONTENIDO_RELACIONADO

  • El Govern destituye a Jaume Reus como director del Institut d'Indústries Culturals
  • "La actitud arrogante que ha tenido Solivellas conmigo es insoportable: me ha sometido a un vacío total"

FIN_CONTENIDO_RELACIONADO