La escritora Almudena Grandes ha sido investida este jueves 23 de enero doctora honoris causa por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) en una ceremonia en la que ha abordado la "soledad del escritor" y ha comentado con humor cómo a ella no le cambia "un diálogo ni Dios".

"Una vez sentí una opresión en el pecho cuando me dijeron que un actor puede llegar a cambiar un diálogo solo con decir que no se siente cómodo interpretándolo. Pues a mí no me cambia un diálogo ni Dios, porque yo soy Dios en mis novelas", ha comentado en un momento de su intervención, levantando las risas de los asistentes.

Grandes ha sido investida honoris causa en la misma ceremonia que el académico de la lengua Darío Villanueva. Durante su discurso, la escritora ha utilizado el desdoblamiento de género de algunas palabras -'lectores y lectoras' y 'todos y todas'- en la semana en que el lenguaje inclusivo ha sido protagonista gracias al informe de la RAE encargado por el Gobierno.

En su reflexión sobre la escritura, ha recordado cómo los lectores son "extremadamente importantes", si bien solo escribe "para una única lectora", ella misma. "Si no consigo interesarme o seducirme, no lo haré con nadie más", ha apuntado en su discurso titulado 'Teoría de los naufragios'.

Grandes se ha comprometido en el acto de investidura a "seguir defendiendo la universidad pública, desde las aulas de infantil hasta el último postgrado universitario". Y ha defendido la labor de los escritores, ya que "ningún otro creador pasa tanto tiempo solo".

Tanto la escritora como Villanueva han recibido el birrete, el anillo, el Libro de la Ciencia y los guantes blancos que tradicionalmente se entregan en este acto. El catedrático de Literatura, Julio Neira, ha ejercido de padrino de la escritora y el también catedrático, José Romera, lo ha sido del exdirector de la RAE.

La posverdad

Villanueva se ha centrado en la posverdad en su discurso, con alusiones al presidente de Estados Unidos, Donald Trump. "Nos resulta difícil asimilar las sorpresas que provoca desde su toma de posesión, pero es un presidente elegido en virtud de un sistema que lo encumbró", ha destacado.

El académico ha lamentado cómo la mentira ya "forma parte de los usos consustanciales de la política", poniendo como ejemplo a la visionaria obra de '1984' de George Orwell. "Las personas somos tan crédulas que, el que el que quiere engañar, se encontrará siempre a quien se deje", ha concluido.