Enfado e indignación en el sector de la moda en la isla. La Mallorca Fashion Week (#MFW) recién celebrada ha sido "la gota que ha colmado el vaso" de una serie de despropósitos perpretados por las instituciones hacia el sector textil, opina Joana Borràs, presidenta del Col·lectiu Moda Mallorca, que reúne a cerca de treinta firmas del ramo.

"Hemos visto la disputa que se ha levantado en torno a la marca #MFW, pero para nosotros la cuestión más grave es que en el evento no había presencia de ninguna marca mallorquina. La #MFW es una marca que está vacía de contenido. Han cubierto la cuota mallorquina con desfiles de tres alumnos de diseño de la isla que están estudiando en estos momentos", refiere Borràs. "Es un sinsentido también porque ni una sola prenda de las que han aparecido en los desfiles se comercializa en Mallorca actualmente", continúa. "Las instituciones han entrado en el juego de una empresa promotora [la de la #MFW] que ha dejado de lado a los creadores, diseñadores y empresas autóctonas", agrega la portavoz del colectivo.

La asociación arremete contra la "política de alfombra rojaque se aplica con la moda en el archipiélago, sobre todo en Mallorca. "El objetivo final de eventos como la Mallorca Fashion Week, supuestamente con ayuda institucional, es la organización de un acontecimiento social que frívolamente reúna a personalidades públicas que nada tienen que ver ni con el sector, ni con Mallorca ni con la potenciación de sus marcas", denuncia Borràs. "Todo esto se ha hecho a las espaldas de los que, día a día, intentamos producir, exportar y poner en valor los productos creados en la isla. No entendemos por qué estas mismas instituciones, con las que tantas veces nos reunimos, pueden cometer el error una vez más de no creer en nuestro sector", lamenta.

Borràs explica a este periódico que el colectivo tiene una serie de proyectos encima de la mesa y que éstos han sido expuestos a las instituciones. "Nos dicen que sí cuando nos reunimos, pero al final nada. Este año no vuelve a haber presupuesto para el sector de la moda", desvela.

Entre esas propuestas, está la de poder mostrar en los hoteles de 4 ó 5 estrellas con boutique una selección de productos textiles de la isla. "El Govern, opina. Organizar una gran pasarela desde el colectivo con apoyo público es otro de los proyectos. "Pero las instituciones no están por la labor", asume Borràs.

La asociación también ha tenido una reunión con el Teatre Principal para introducir a diseñadores de la isla para la confección del vestuario. "Otra de nuestras reivindicaciones es poder ocupar los locales que estaban en la Costa del Teatre. Que aquel espacio se convierta en un centro de artesanía, diseño y producto de la isla. Las pequeñas marcas cada vez tenemos más dificultades para sobrevivir en Palma, concluye.