Morgan son Nina de Juan, Paco López, Ekain Elorza, David Schulthess y Alejandro Ovejero, un grupo de amigos que en el año 2012 se juntaron para "tocar y pasarlo bien". Esto ocurrió después de que De Juan mostrara sus canciones a Paco López, a quien le hacía los coros en algunas canciones, y a Ekain Elorza. En 2012 llegó una primera maqueta, en 2016 su primer disco, North, y en 2018 el segundo, Air, ambos autoeditados. Y, con estos dos últimos, el éxito. Ahora, una despedida.
En enero concluirán la gira de Air, un camino de casi dos años, "un viaje brutal", dice De Juan. "La etapa final de este disco empezará en Mallorca [mañana, viernes 4 de octubre, en el Auditorium de Palma, a las 21 horas]. Hemos preparado algo especial para estos últimos conciertos, el repertorio ha variado. Queremos que sea especial, que el público vea lo que hemos aprendido y hecho". Será una despedida por todo lo alto, porque cuando concluya este tour tienen que claro van a descansar: "Las dos giras han ido muy juntas. Necesitamos un par de meses de vacaciones para filtrar emociones, aunque creo que a las dos semanas estaremos aburridos y nos llamaremos. Pero no sabemos cuándo volveremos a grabar, la idea es parar. Necesitamos un poco de calma y tomar distancia de todo lo que ha pasado", apunta la cantante.
La isla ya conoce a Morgan. Actuaron en el Mallorca Live Festival en el 2018, y después presentaron Air en Teatre Principal: "En Calvià flipamos, no nos esperábamos ese recibimiento. Y cuando volvimos [en el teatro] sentimos el mismo cariño, esperamos que el viernes sea igual".
Morgan alcanzó pronto el éxito, cuando ellos "simplemente queríamos tocar". De Juan asegura que son "conscientes de lo difícil que es que haya pasado todo esto. Hemos podido hacer cosas alucinantes, no sabemos muy bien por qué la gente conecta con nosotros", sostiene. Su voz es, precisamente, uno de los elementos que más deleitan al público. No obstante, "tenemos claro que Morgan no solo es mi voz, y creo que todo el publico que viene a vernos valora que somos una banda. Mi voz sería nada sin todo lo demás", dice Nina de Juan. El grupo presume, a menudo, de su buen rollo y de la amistad que les une, algo que se "afianza con el tiempo" y sin lo que "no tendría sentido pasar tanto tiempo juntos, sería raro".
Casi todas las canciones de Morgan las escribe Nina de Juan, en inglés, excepto algunas excepciones. Y huyen de las etiquetas: "Supongo que hacemos pop rock que no es ni pop ni rock ni nada. Cuando entramos en el local no pensamos en géneros, sino en lo que nos pide la canción. Siempre desde el respeto", recalca.
Palabras como intensidad y emoción podrían definir sus directos. La gente les dice que "son diferentes" a otras bandas. Y ellos no saben cómo explicarlo. "Supongo que lo que sentimos nosotros sobre el escenario llega al público", dice De Juan, quien dice que cuando está sobre el escenario "estoy medio en trance, a veces no me acuerdo muy bien de lo que ha pasado. Pero la sensación es brutal. Siento cosas que no había sentido nunca, tanto si estoy mirando al público, como cuando miro a los chicos y los veo disfrutando. Me parece milagroso". Hasta nueva orden, el de mañana será su último concierto en Mallorca.
