El nuevo director del Institut d'Indústries Culturals (ICIB), que sustituirá en el cargo al cesado Jaume Reus, deberá acreditar un nivel B2 de catalán (intermedio). Así lo anunció ayer la consellera de Presidencia y Cultura Pilar Costa, tras la presentación del concierto del 30 aniversario de sa Simfònica.

"Para que no haya ninguna duda y todos se queden tranquilos haremos una modificación de las bases que recoja el requisito de catalán con el nivel B2", subrayó Costa, quien rehúye del concepto concurso para aclarar que el sucesor de Reus será elegido mediante una convocatoria pública: "Es una convocatoria pública, lo digo para diferenciar. No es un concurso, estos son para los funcionarios. En el caso del ICIB, que es el mismo tipo de contrato de alta dirección, tiene una peculiaridad, y es que los estatutos recogen que se hará por una convocatoria pública, que es lo que haremos, y el único requisito en este sentido es el de tener una titulación universitaria".

Sobre la comparecencia en el Parlament de la delegada de Cultura, Catalina Solivellas, para evaluar su idoneidad en el cargo, tal y como lo ha solicitado el Partido Popular, Costa afirmó que la afronta "con total normalidad" y que Solivellas "comparecerá encantada cuando se lo pidan para explicar su proyecto".

La consellera de Cultura también negó que Solivellas haya apostado por el silencio, a pesar de que este diario lleva días intentando hablar con ella. "No hay ningún tipo de silencio", aclaró. "Ayer [anteayer] la escuché en IB3", añadió. En concreto, fue en el informativo de las 7 de la mañana de IB3 Ràdio. Solivellas declaró en este medio: "Se han cumplido escrupulosamente los estatutos del ICIB, elaborados en la anterior legislatura. El Govern quiere seguir dando un impulso al ICIB, que por otra parte es lo que nos pide el sector", señaló.

Reiteró ayer esta idea Costa, quien quiso aclarar que "el único motivo" que ha habido en su despido es el de "intentar dar un nuevo impulso al ICIB" y afirmó que "al Govern nunca se le ha pasado por la cabeza o ha tenido la intención de pensar que la persona que esté al frente del ICIB no tenga los conocimientos de catalán necesarios para gestionar el ICIB".

"Respeto absolutamente las posiciones de aquellos que no les gusta la destitución de Reus", añadió la consellera. "Es una decisión con responsabilidad política que asumo".

Interrogada por las formas en el despido de Reus, que acusó a Solivellas de "arrogante", Costa señaló: "Puedo entender el sentimiento de cualquier persona que no continúa en su puesto de trabajo. Agradezco el trabajo que haya podido hacer el señor Reus y solo tengo palabras de agradecimiento para él".

A la pregunta de si el proyecto de Solivellas corre peligro, la consellera de Cultura respondió con una sonora carcajada.

Por otro lado, Més per Mallorca calificó de "sentido común" la rectificación anunciada por Pilar Costa. "La hemos recibido en general de forma positiva", comenta el portavoz adjunto de los ecosoberanistas Josep Ferrà. "Ha sido fruto del posicionamiento de mucha gente, no sólo de Més. El Pi también presentaba una PNL, algunas entidades del sector cultural, como la OCB, se han pronunciado. También el STEi", enumera. Ferrà opina que en esta corrección del PSOE también ha influido que parte del sector cultural haya mostrado descontento por el cese de Jaume Reus y "porque no han visto el tema del nuevo concurso claro".

Sobre si es suficiente o no un nivel B2 de catalán (en el anterior concurso se exigía el C1), el portavoz adjunto no quiso valorarlo, "en el partido está habiendo un debate sobre esta cuestión y pienso que son los expertos los que tendrán una opinión más formada ahora mismo".

Agustina Vilaret: decreto de usos

La secretaria autonómica de Universidad, Investigación y Política Lingüística, Agustina Vilaret, se mostró optimista con la rectificación del PSOE. "Lo valoro positivamente". "Sería lo suyo que todos los cargos tuvieran el catalán, pero no está regulado este tema", sostiene. En cuanto a la cuestión del nivel exacto (si B2 o C1), señaló la complejidad de determinar cuál sería el ideal. "El caso es que puedan utilizarlo con corrección", indica. "Desde Política Lingüística favoreceremos las herramientas para que esto pueda ser posible". Vilaret recordó que hay un decreto de usos lingüísticos en la Administración (el 49/2018). "En un artículo se recoge que los cargos públicos cuando hacen declaraciones en medios públicos las han de hacer en catalán", apunta. "Es un decreto reciente que se irá cumpliendo de manera gradual". En cuanto a la comparecencia que el PP ha pedido para evaluarla, la secretaria señaló que no tiene nada que esconder. "Si quieren conocer nuestro programa, no hay problema, somos transparentes. Lo que no sé es si hay otra cosa detrás de esta petición. Justamente han solicitado la comparecencia de tres mujeres o igual es que yo estoy en un partido que no les gusta", concluye.

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