Hace un año que el actor Armando Buika (Palma, 1970) está girando por toda España con la obra ¿Quién es el señor Schmitt?, dirigida por Sergio Peris-Mencheta. Con una carrera de más de veinte años dedicada a la interpretación, ésta será la primera vez que Buika actúe en su ciudad natal. Será en el Auditorium los próximos 6 y 7 de septiembre.
P ¿El público saldrá del teatro sabiendo quién es el señor Schmitt?
R Quién es el señor Schmidt... esa es la pregunta del millón. Poco puedo hablar sobre la obra porque acabaría haciendo un spoiler horroroso. Lo que le pido a la gente es que vaya con la mente abierta, van a pasar muchas cosas van a creer y dejar de creer y se van a sentir perdidos como se sienten los personajes. Es una obra muy quijotesca con un mensaje muy potente y lo que sí puedo avanzar es que no termina con los aplausos, cuando la gente vaya a casa se irá preguntándose quién es.
P ¿La cuestión que se plantea en realidad es quiénes somos?
R Esa pregunta se puede hacer desde muchos lugares y es algo muy personal; si yo contara o dijese como se tiene que dirigir el pensamiento o qué idea hay que tener de la obra, haría un flaco favor porque hay que descubrirlo por uno mismo.
P ¿Y quién es Armando Buika?
R Un luchador, un soñador, alguien que se va construyendo su futuro a base de muchísimo trabajo, de muchísimo esfuerzo. Alguien que ha conseguido superar todas las barreras que había a mi alrededor por mi condición y con un mensaje muy prometedor y esperanzador.
P Es la primera vez que actúa en Mallorca ¿Por qué cree que no ha tenido oportunidades aquí?
R No lo sé. Quizás por mi condición que exige que los personajes sean de un determinado matiz no ha surgido la oportunidad, pero todos esos condicionantes están cayendo y espero que esta actuación sea un punto de inflexión.
P ¿Se refiere al hecho de que es usted afrodescendiente?
R Sí, no lo quería decirlo, pero creo que tiene que ver con eso y eso que Palma podría dar lecciones al resto de España por cómo trata a los inmigrantes. Yo desciendo de inmigrantes, pero no es mi caso. Lo paradójico es que soy español y soy mallorquín y es curioso que me cueste tanto llegar a trabajar en Mallorca.
P ¿Cree que esto va a cambiar a partir de ahora?
R Espero que sí y aprovecho para lanzar una llamamiento a directores para que abran el abanico, que enriquezcan sus producciones con matices, con colores que es el momento de hacerlo y el primero que lo haga le garantizo que después les seguirán muchos. Pedro Almodóvar ha anunciado que va a utilizar actrices negras en sus próximas producciones, así que vamos a ello, vamos a hacerlo. Hay muchísmas historias maravillosas que contar sobre la diversidad.
P ¿Su porpia experiencia le llevó a fundar Black View?
R En Black View trabajamos para dar visibilidad a los artistas afrodescendientes. Hablando con mi representante nos dimos cuenta de que sólo podía trabajar cuando se pedían actores negros, pero si quieren una actor alto, de complexión fuerte, con voz profunda con buena dición, yo entro dentro de esos parámetros. Me presentaba a los castings y al principio no pasaba nada, hasta que un día una directora me dijo: "No hemos pedido un actor negro". Le contesté que tampoco habían dicho que no lo fuera. Esto nos hizo ver que el motivo por el que los actores negros no trabajan en España no es por un tema racial es simplemente porque no existimos y lo que no se visibiliza no existe.
P ¿Ha notado un cambio o le siguen llegando sólo papeles estereotipados?
R Ha habido un cambio, aunque cuesta llegar a tener papeles protagónicos. Cuando veo que se exportan series españolas en las que el elenco son todo blancos, hay algo que me chirría. Al final todo el mundo llega a lo mismo: esto tiene que cambiar porque España es un país multicultural. Pero mi mensaje es positivo, se están haciendo proyectos muy interesantes.
