El esperado concierto eléctrico de Jon Bon Jovi a bordo del Norwegian Pearl ya ha comenzado en aguas de la bahía de Palma [vea aquí las imágenes. El barco ha zarpado a las 18:00 del puerto de Ciutat y se ha dirigido hacia la costa de Calvià. En el puente 13, un escenario como el de un festival al aire libre, se levanta sobre una de las dos piscinas. A las 18:59, más de 2.000 personas ocupan el espacio de este puente y los dos superiores, terrazas privilegiadas sobre el escenario. Comienza el recital después de una breve presentación: "señoras y señores... Jon Bon Jovi". Se desata cierta locura entre el publico mientras Calvià queda a estribor.

Jon Bon Jovi, 57 años muy bien llevados aparece en el escenario: pelo canoso, camiseta azul sin mangas y gafas de sol de piloto con cristales de espejo.

El músico de New Jersey tiene el público en el bolsillo desde el momento en que sube al escenario. Lo sabe, sonríe, señala y saluda aquí y allí. Hombres y mujeres (mayoria de las segundas) de 53 nacionalidades unidas alrededor de un escenario que navega al sur de la bahía de Palma.

Tras dos canciones que encienden a los fans, Bon Jovi da la bienvenida a España a todos los viajeros. No hay referencia concreta a Mallorca, aunque sí a la tormenta que ayer cayó sobre la isla. "Parece que he traído la lluvia al Mediterráneo", indica, siguiendo el reconocimiento que hizo en el concierto acústico del martes: "parece mentira... os traigo de crucero y os meto en un barco donde no deja de llover", lamentó. Hoy es diferente: el día acompaña, el sol está cayendo y el cielo está absolutamente despejado sobre la cubierta del Norwegian Pearl.

Jon Bon Jovi llegó ayer por la tarde a Palma pasadas las 16:00 horas y accedió al buque 45 minutos después. El artista ofreció un concierto en acústico que debido al mal tiempo se trasladó de la cubierta al teatro de la embarcación. El músico realizó dos pases para que ningún pasajero se quedar sin disfrutar de su música. Más tarde protagonizó una sesión de fotos con sus fans.