Reivindicar el cine en lengua de signos como parte de "la cultura sorda" y como un estilo de cine propio. Ése es uno de los principales objetivos del II Festival de Cortometrajes en Lengua de Signos, que se celebrará este sábado e incluirá la emisión de ocho cortos en lengua de signos, incluyendo el primero rodado en Mallorca con actores y guionistas sordos: Las piedras perderán en silencio.

José Luis García, promotor del Film Sign Day, señaló ayer que se persigue la visibilización del colectivo y su derecho a un ocio integrador, una opción que en teoría está promovida por una ley de 2007 pero que no siempre se cumple (por ejemplo, la obligación de las cadenas de ofrecer al menos diez horas semanales de programación con intérprete de signos).

Como amantes de la versión original y de un arte que nació como un lenguaje puramente visual, los ganadores del Goya Jaume Carrió y Laura Gost mostraron ayer su apoyo a la cita. Ledwin Vega, codirector junto a García de Las piedras perderán en silencio, defendió dar voz a "las culturas no dominantes" y normalizar su presencia en pantallas y escenarios.

El festival, abierto a sordos, sordociegos (habrá intérpretes para ellos) y oyentes, arrancará a las 16 horas en el Centro de Cultura de Sa Nostra y el dinero que se recaude será para la Fundació Vicente Ferrer.