El mundo mitológico de la novela, sus toques surrealistas y su humor negro han sido los elementos que el jurado ha destacado de la primera novela de Rosa M. Calafat, La família. Sagrada exposició de la mort. Una primera novela que se ha llevado un gran reconocimiento, algo que "no pasa cada día" y que enorgullece a la andritxola.

"Se trata de una historia narrada de principio a fin pero que intenta plasmar la atemporalidad y una idea básica: que hace miles de años que somos la misma especie y que tenemos unos pecados capitales y una conducta atemporal", explica la escritora, que centra su historia en dos protagonistas, una hija que vive y una madre muerta, a las que se suman los protagonistas secundarios, tanto vivos como muertos. "Hablamos de realismo mágico, se juntan dos mundos paralelos, el de la vida y el de la muerte", incide la autora, que menciona que una de las técnicas que utiliza para hablar de estos dos mundos es la desorganización del relato, una habilidad que también ha destacado el jurado. La envidia, la soledad, el sexo y la inocencia son algunos de los temas que se tratan en la obra.

Está acostumbrada a trabajar con datos y conocimientos adquiridos a través de métodos de investigación. Sin embargo, asegura que "nunca había tenido las sensaciones que he sentido escribiendo esta novela. Los personajes llevaban en mi cabeza unos cinco o seis años. Un día me senté y me puse a escribir. Así estuve, escribiendo noche y día, durante dos meses. Dormí muy poco", revela. Una vez acabada la historia, se sintió "liberada" y "descansada". Un descanso que no le durará mucho, porque asegura que ya tiene a su cabeza trabajando en los personajes de lo que será su próxima creación literaria.