Conscientes de que "la Navidad no es igual para todos", el concierto de este año de las corales de la UIB se presentaba con la ambición de llamar al compromiso y a la solidaridad con las personas refugiadas que arriesgan su vida en medio del Mediterráneo en busca de una mejor vida.

La voz de la actriz mallorquina Catalina Florit guió la velada musical a partir de una narración centrada en el viaje de una persona refugiada: Wissam, quien pierde a sus familiares y tiene que escapar de Siria junto a su hermano. La duda de si conseguirían escapar mantenía la atención del público en todo momento. El silencio que imponía la voz de Florit contrastaba con los grandes aplausos que regalaba el público a los coristas, que interpretaron temas en diversos idiomas. Temas como Keren or (Un rayo de luz) de la cantante israelí Achinoam Nini; Why we sing (Por qué cantamos), de Greg Gilpin; o Keren or (Un rayo de luz) Why we sing (Por qué cantamos), For the beauty of Earth (Por la belleza de la Tierra), fueron algunas de las piezas que los asistentes pudieron disfrutar, en un Auditorium de Palma repleto de gente.

El escenario era un protagonista más de la velada. Su disposición lumínica, que empezó siendo de color azul eléctrico, variaba a colores más cálidos en algunos momentos. Al fondo se proyectaban imágenes en una gran pantalla.

El emotivo concierto fue una realidad gracias a los miembros de la Coral Universitat de les Illes Balears y los de todas sus corales filiales: Corals Infantils (Cincset, Vuitdeu i Onzequinze), Coral Juvenil de Joventuts Musicals de Palma, Cor de Majors de la PalmaUIB

La intensidad de la historia y la potencia de 400 voces sobre un mismo escenario marcaron el clásico concierto de Navidad de este año de las corales de la UIB.