Parecía que el formato de proyección más charla estaba destinado a desaparecer pero un grupo de irreductibles cinéfilos se niega a aceptar esta realidad. Por ello CineCiutat acogió ayer el cinefórum sobre la película de animación japonesa, para todos los públicos, “El viaje de Chihiro”. Una sesión a la que muchos no pudieron asistir porque se habían agotado las entradas. Parte de la culpa la tuvo la doctorada en Historia del cine y especialista en el estudio de animación Ghibli, Laura Montero Plata que asistió para ofrecer un poco de luz frente a los secretos que esconde el filme nipón dirigido por Hayao Miyazaki. Todo ello presentado por el profesor y doctorado en videojuegos, Víctor Navarro Remesal.

Previamente a la proyección, Montero y Navarro se dedicaron a introducir brevemente la película a la par que reivindicaron la riqueza cultural del cine de animación. Incluso algún que otro valiente se atrevió a pedirle un autógrafo a la doctorada. Laura Montero aseguró que el cine de animación es algo más de lo que aparenta: “le preguntaría a la gente que piensa que son películas para niños, que es el cine. ¿Creen que el cine de imagen real es algo así como la última película de el libro de la selva? Creo que hay que cambiar la perspectiva que tenemos y se debe entender que -el cine de animación- es un medio para lograr transmitir algo”.

Por otro lado, defendió que “no hay que bajar el nivel porque sea una película para niños”. Aunque para algunos el cine de animación pueda parecer algo exótico no hace falta ser un experto en Japón para comprender sus películas, “la mayoría de los japoneses no entiende sus referentes” afirma el doctorado. Para los espectadores que estén acostumbrados a las películas de Disney, la especialistas en Ghibli afirma que “esta animación rompe estereotipos. Ofrece una lectura que puedes entender pero que no tienes por que compartir. Es algo que simplemente te ofrece diferentes puntos de vista”.

La proyección del filme transcurrió con normalidad aunque mantuvo a toda la sala en silencio, interrumpido por las risas de los espectadores y algunos aws de ternura muy sinceros. Al acabar se creó un coloquio, en el que Víctor Navarro preguntó a Laura Montero para que explicara las flaquezas y debilidades de la película. Posteriormente se creó un debate frente a como estaba la situación del mercado de la animación japonesa en España que “es mejor de lo que pensamos”, afirmaron ambos. Respecto a la película, la especialista en el estudio Ghibli explicó que “la animación hasta ese momento tenía unos códigos visuales muy marcados y esta película rompió con ellos”.

En torno a la estructura remarcó que “está dividida como una obra de teatro noh. Consta de un primer acto en el que un personaje enmascarado le cuenta su vida a un viajero. Hay un intermedio en el que se rebaja la tensión de la obra con unos momentos cómicos y en el segundo acto, el personaje se descubre y desata el drama de la obra.”

Dado la recepción de la película, ganadora de un Óscar a mejor película de animación en 2003 y del Oso de oro de Berlín en 2002, CineCiutat se está replanteando proyectarla de nuevo para acoger a todos aquellos que no pudieron asistir a la sesión.