El Cor del Teatre Principal pone la guinda a sus 35 años con la Cantata el Rei en Jaume I, una composición de Antoni Parera Fons que estrenó hace diez años y que este miércoles a las 20 horas recupera para conmemorar el aniversario que ha ido celebrando a lo largo de este año. Se trata de un concierto sinfónico-coral en el que la formación dirigida por Pere Víctor Rado estará arropada por la Orquestra Simfònica de les Illes Balears y por un reparto encabezado por Àngel Òdena como el Rei en Jaume I y completado por Antoni Aragón, Pablo López, Tomeu Bibiloni, José Manuel Sánchez, Jorge Tello, Miquel Campaner, Lluís Maicas, Maia Planas, Marta Valero y Miquel Mestre.

Rado lleva la batuta de la formación desde hace tres años, aunque desde 2003 era el director asistente. Entró como corista en 1996 y asegura que en sus 35 años el coro goza de muy buena salud vocal. "Nos llegan muchas más voces que están estudiando canto en el Conservatori y ya tienen experiencia. Además, la cultura musical de los coristas ha crecido y esto se ha notado en la formación", reconoce un Pere Víctor Rado que confiesa que siempre se plantea el mismo reto "sea el 35 aniversario, sea el 34 o sea el que sea". "El reto es siempre ir más allá, ir mejorando al máximo", reconoce. "El primer objetivo sería no bajar la calidad pero siempre quieres ir a más". Y si uno le pregunta un deseo de aniversario, una nueva meta para el coro, Rado no duda. Su objetivo es que el Cor del Teatre Principal sea un coro muy versátil que pueda afrontar cualquier estilo de música. Su filosofía es "siempre estar al máximo" para que sea un coro "muy potente vocalmente y con un abanico de posibilidades muy amplio".

Ligado a la ópera

Una de sus cantaires fundadoras Maria Rosselló, recuerda que el coro fue fundado por el maestro Rafel Nadal con el objetivo de ser el coro de ópera y zarzuela. "El coro ha evolucionado mucho. Hay muchos pero como coro de ópera es único", asegura. "Es una formación que se ha consolidado como una formación ligada a la temporada de ópera", añade su director, que puntualiza que además de las obras líricas también protagonizan distintos conciertos como el Concert de Nadal del próximo 15 de diciembre. "Aunque hacemos recitales con otro repertorio, sobre todo somos un coro escénico, un coro de ópera y zarzuela", especifica.

Molinos de viento fue la primera zarzuela e Il Trovetore, la primera ópera de este coro cuyos 60 coristas deben estar acostumbrados a cantar "de mil maneras". A veces lo hacen en el suelo, otras saludando o, incluso, corriendo. Esto requiere ensayos. Por lo general, el papel del coro en las óperas es el de pueblo, por ello, no se puede concretar un perfil concreto de corista. "Normalmente hacemos de pueblo y este papel requiere que haya de todo". Pero si hay algo que tengan en común los cantaires del Principal es que son personas entregadas vocalmente y con facilidades para aprender música, además deben tener actitud corporal sobre el escenario. "Tienen facilidad a la hora de estar sobre las tablas", explica Rado.

Grandes voces

Y al ser el coro de la temporada de ópera, los coristas del Principal se codean con grandes voces y con diferentes directores. Eso influye en la evolución de la formación. "El coro es una escuela", responde preguntado sobre si la formación puede ser una buena plataforma para aquellos que deseen formarse como cantantes de ópera. "Lo que coges cantando en el coro es mucha experiencia de escenario. Además el hecho de que profesionales de gran nivel canten a tu lado, te influye porque aprendes mucho de ellos. Como cada ópera cuenta con un director distinto, la experiencia del corista es de constante cambio. Ven directores diferentes, ideas musicales distintas y eso les permite crecer mucho musicalmente y escénicamente", desgrana.