Para el sector musical, la de ayer fue una noche especial, marcada por las reivindicaciones y las emociones. Se celebró la primera edición de los Premis Enderrock de la Música Balear, una iniciativa que aplaudieron y desearon muchos más años de vida todos los premiados desde el atril. Músicos, agentes del sector, amistades, familiares, conocidos. Todos estaban en el teatro Xesc Forteza, donde se celebró la gala conducida por la actriz Ann Perelló y el cantante Cris Juanico.

Se entregaron un total de dieciséis galardones, de los cuales once se otorgaron gracias al voto popular -se han contabilizado más de 6.000 votos- y cinco según la valoración de un jurado. Antes de la gala ya se conocían los premiados de la crítica: el Premi Enderrock de Honor fue para el cantautor Joan Ramon Bonet, pionero de la Nova Cançó, que recogió el premio bajo la atenta mirada de su hermana, Maria del Mar Bonet, que le entregó el premio y le dedicó una canción; al guitarrista y productor Joan Bibiloni le reconocieron sus 50 años de trayectoria; el premio del Mejor disco del año de la música balear fue para Da Souza, que en febrero publicó su Futbol d'avantguarda; y el Mejor disco revelación se lo llevó Salvatge Cor por su Hi ha gent que entra dins la teva ànima i ja no en sortirà mai més. El premio especial del jurado fue para Mezquida & Chicuelo.

Las sorpresas de la gala fueron, además de las múltiples actuaciones de diferentes artistas -Maria del Mar Bonet, Jansky o la menorquina Anna Ferrer, entre otros-, los nombres que el público decidió que fueran premiados, el secreto mejor guardado de la velada. Así, el grupo Xanguito, se llevó dos premios (mejor gira y mejor canción). Suasi se llevó el galardón a Mejor disco pop rock, que dedicó a Projecte Home; en Valtònyc recayó el premio a Mejor disco de músicas urbanas, galardón que recogió su hermana, quien aclaró que el rapero "no es un terrorista" y que con él se ha cometido una injusticia: "Solo era un niño de 18 años enfadado con el mundo", expresó entre lágrimas.

Además, el público concedió a los muy aclamados Anegats el premio a Mejor artista. La cantante Clara Fiol tuvo el apoyo suficiente y fue premiada como Artista revelación. El Mejor disco de canción de autor cayó en manos de la agrupación Vers Endins; el Mejor disco de folk, fue para Xaloc Música; el premio a Mejor disco de jazz se lo llevó el trabajo Progression: Un tribut a Salvador Font 'Mantequilla', de Glissando Big Band & Toni Vaquer; el Mejor disco de clásica, para Voicello; y el Mejor disco en lengua no catalana fue para Ahora bajo y arreglo todo, de Dinamo.

Recuerdos y homenajes

También hubo palabras y momentos para los que ya no están. Así, se pasó un vídeo-obituario que se proyectó después de la actuación de Anna Ferrer, que interpretó Plorarás, un adelanto de su próximo trabajo. La cinta recordó el reciente fallecimiento de la cantante Queta Pizà (1955-2018), mitad del dúo infantil Queta & Teo; el flabioler y lutier Damià Bosch 'Ciriaco' (1939-2018) y el activista cultural y músico Antoni Artigues (1950-2018), miembro de Mag Poesia. También se felicitaron algunas de las conmemoraciones más destacadas relacionadas con la música balear: los 50 años del concierto de Jimi Hendrix en la discoteca Sgt. Pepper de Palma, el medio siglo del Auditorium de Palma o los 25 años de vida de la fiesta Sant Antoni a Gràcia.

Con risas, música y con muchas ganas de engrandecer el sector. Así se vivió esta primera noche de los Premis de la Música Balear, donde unos cuantos grupos y nombres propios se llevaron, anoche, un premio. Sin embargo, por la emoción que se respiraba en el Xesc Forteza, no hay duda de que el ganador por excelencia fue todo el panorama musical en catalán del archipiélago.