Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"Los 600 'llaüts' que quedan no deben ser sólo piezas de museo, hay que darles un uso"

"El Museu Marítim es un proyecto de consenso, es un acierto, todo el mundo lo ve" - "En el futuro, tendremos que estudiar cómo compartimos recursos y espacios con el Museu de Mallorca" - "El turismo cultural hay que creérselo y trabajar seriamente para conseguirlo"

El historiador y gestor cultural catalán Albert Forés, en el Parc de la Mar. b. ramon

El punto cero del Museu Marítim es una exposición que se inaugurará el próximo 1 de diciembre en Ses Voltes, segunda sede provisional del proyecto liderado por el Consell. Contendrá una acción participativa, una red de los deseos donde los visitantes podrán depositar sus inquietudes y anhelos respecto al nuevo equipamiento dedicado al mar. La sede definitiva del museo está previsto levantarla en el solar que ocupa Astilleros Mallorca.

¿Qué objetivos ha trazado para el Museu Marítim?

El museo debe ser un espacio vivo y una herramienta que sirva para reflexionar sobre qué está pasando en el Mediterráneo y en concreto en las costas de Mallorca y Balears, y cómo interactuamos con este mar. Los ejes que articularán el discurso del Museu Marítim son: la biodiversidad impactada, la arqueología subacuática, el patrimonio marítimo flotante y el patrimonio marítimo terrestre. No nos dedicaremos a hacer discursos ni a dar soluciones mágicas para acabar con los plásticos o con las muertes de las personas en el Mediterráneo. Daremos herramientas para desarrollar vías de reflexión, de diálogo y de trabajo sobre éstos y otros temas.

¿Qué fondos gestionará este museo?

Los hemos de construir cuando tengamos recursos. De momento, está la colección del museo de Sóller. Por otra parte, las barcas del Castell de Bellver. De éstas, habría que ver cuáles son musealizables. También está la colección que se conserva en el Museu de Mallorca y la del Consolat de Mar. Todo esto ya será para 2020, cuando hayamos adecuado el espacio de Ses Voltes.

¿Tiene medios para hacer todo esto?

En general, faltan medios. Hay dificultad para conseguir recursos humanos. El problema es que eso ya ni depende del Govern, ni del Consell, ni los ayuntamientos. Ahora ya es la famosa Ley Montoro la que marca el gasto. Y esto limita mucho. Carmena Marchena, en Madrid, tiene superávit y no puede hacer nada con él. Hasta que esta normativa no se supere, no puedes crecer. El Museu Marítim de Barcelona tiene 99 personas en plantilla. Es Champions League. Viene de un tiempo en que los consorcios se podían nutrir de mucho personal. Ahora esto no es posible.

Si saben que no se puede crecer, ¿por qué hacen un Museu Marítim?

Porque está la esperanza de que se pueda crecer. Empezamos a caminar con la voluntad de que esto cambie. Por otra parte, el Museu Marítim es un proyecto de consenso, es un acierto, todo el mundo lo ve. La pregunta no es por qué un Museu Marítim sino por qué no tenemos todavía un Museu Marítim. En Cataluña hay una red de museos marítimos bestial. Casi cada localidad de costa tiene uno. En Europa hay muchos, y en España también: País Vasco, Valencia... Si pudiésemos atraer turismo de museos marítimos creo que lo tendríamos porque muchos de los que vienen aquí tienen en su país de origen un museo de este tipo.

¿No era suficiente con que el Marítim fuera una sección del Museu de Mallorca?

Está bien que seamos independientes del Museu de Mallorca. Lo que tendremos que hacer en el futuro es estudiar cómo compartimos recursos o cómo compartimos espacios. Por ejemplo, el Museu de Mallorca ahora está en una nueva fase constructiva y pasa al Consell. Hemos de ver cómo gestionamos las cosas. Los almacenes, que es una gran infraestructura, podrían ser algo conjunto. O en lugar de invertir en dos laboratorios de restauración, pues tener uno importante. Pienso que teniendo una madre común, en este caso el Consell, tendría que ser más fácil esa colaboración.

Para sentar las bases del museo, ¿de qué manera está trabajando con la comunidad implicada en el mar?

Me estoy reuniendo con ellos. Tendremos que hacer unas jornadas de estudios marítimos de cara al año que viene. Y quiero que los diversos sectores se impliquen. Pescadores, fareros, gente de la vela, gente del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, Biología de la UIB, el Instituto Balear de Estudios de Arqueología Marítima€ Hay que recoger sus impresiones y opiniones. También son indispensables los Amics del Museu Marítim o los Amics de l'Alzina, los alzinaires, o la gente de Cala Gamba... Y personas individuales.

¿Qué piden estos colectivos?

Hay gente que está muy preocupada por la vela latina, otros están preocupados por la evolución de la tipología de las barcas, las embarcaciones y la flota marina de Mallorca. En los últimos diez años hemos pasado de tener 1.400 llaüts a apenas 600. La flota ha disminuido un 60%. Conservarlos está bien, pero nos hemos de preguntar también por qué queremos conservar toda esta flota. Lo que quiero decir es que no han de ser sólo una pieza de museo, sino tener una utilidad, estar vivos. Hay que estudiar salidas en este sentido.

Antes ha mencionado el turismo cultural. Es un tema en boca de políticos y los nuevos gestores de centros culturales.

El turismo cultural te lo has de creer. Y has de trabajar en ello para conseguirlo. Has de preguntarte para qué quieres a esos visitantes: ¿porque te dejan dinero o porque quieres dar a conocer tu patrimonio marítimo al mundo? Para mí, ha de ser por el último motivo. Si quieres tener turismo en el museo, también has de pensar dentro del museo en un equipo de turismo: irte a la Escola d'Hoteleria o a empresas profesionales, y ver cómo trabajar este tema, cómo generar algún producto expresamente para turistas. Alguna exposición temporal, por ejemplo. El problema también radica en que, en la isla, la mayoría de empresas culturales que hay se dedican a la educación. No hay casi ninguna volcada en desarrollar estrategias para atraer turismo cultural.

Compartir el artículo

stats